Fotos: RFET
MURCIA. Las selecciones españolas cadetes y juveniles de tenis han conseguido sus objetivos de seguir adelante en las Copas de Verano con el cartagenero Rafael Segado y la granadina afincada en Murcia Ariana Geerlings en sus filas, concretamente en el equipo nacional sub-16 masculino y en el sub-18 femenino.
Los combinados de la Real Federación Española de Tenis (RFET) estarán presentes en la fase final por los respectivos títulos, la cual se celebrará del 1 al 3 de agosto en diversas ciudades europeas.
El equipo cadete de chicos, en el que Segado, quien entrena en la JC Ferrero Equelite Sport Academy de Villena, ha estado acompañado por el madrileño Martín Landaluce y el valenciano Carles Córdoba, jugará por la Copa Jean Borotra, clasificatoria para la Copa Davis Júnior, en la localidad francesa de Le Touquet tras alcanzar la final de su grupo zonal en el Club CM Valencia Tennis Center.
El conjunto capitaneado por Óscar Burrieza estuvo exento de la primera ronda y superó en semifinales a Ucrania por 3-0 antes de imponerse en la final a Francia por 2-1.
Por su parte, las sub-18, con Geerlings, del Real Murcia Club de Tenis 1919, haciendo equipo con la castellonense Raquel González Vilar y la madrileña Carolina Gómez Alonso y con Eric Domènech ejerciendo de capitán, lucharán por la Soisbault Cup en Granville, también en Francia.
En su fase de grupos disputada en la población italiana de Maglie, España se vio superada en la final por las anfitrionas por 2-0, aunque, tras superar a Eslovenia por 2-1, ya tenía el billete para la fase final.
Mientras, el equipo femenino sub-16 viajará a la población checa de Marianske Lazne para disputar el título de la fase europea de la Billie Jean King Cup júnior. Así será tras su buen papel en la competición celebrada en la isla griega de Rodas, donde ganó a Grecia por 3-0 y antes a Letonia y a Ucrania en ambos casos por 2-1.
El conjunto sub-18 masculino aspira a conquistar la Copa Valerio Galea en la ciudad francesa de La Rochelle una vez superada la fase disputada en la República Checa, concretamente en Veska, donde se impuso a Turquía y a Austria por 3-0 en ambos enfrentamientos antes de caer en la final contra la selección local por 2-1.