MURCIA. Cinco horas después de conocerse la moción de censura, el presidente de la Comunidad, Fernando López Miras, ha comparecido en rueda de prensa desde el Palacio de San Esteban. Con visible gesto de enfado por la maniobra de su socio de Gobierno, el todavía jeje del Gobierno regional ha asegurado que se mantendrá al frente del Ejecutivo "hasta el último minuto" y ha anunciado la destitución de los consejeros de Ciudadanos "que han perpetrado el atraco".
El cese afecta a la portavoz y consejera de Empresa, Ana Martínez Vidal, y al consejero de Transparencia, Sánchez Torregrosa, según precisaron a Murcia Plaza fuentes regionales. Ambos dirigentes naranjas son miembros de la directiva regional de su partido, mientras que los otros dos consejeros, la vicepresidenta Isabel Franco y Miguel Motas, continúan al frente de sus carteras, dado que no son integrantes de la ejecutiva del partido.
López Miras ha reconocido que conoció la noticia de la moción de censura en la noche de este lunes, tras recibir el aviso de un concejal de Ciudadanos, cuyo nombre no desveló. Miras asegura que descartó convocar elecciones porque "este no es el momento" y señaló que se mantendrá en la Presidencia hasta que el Boletín Oficial lo permita. "Cumpliré con mi obligación hasta el último minuto, con lealtad, con trabajo diario". De haber convocado elecciones, tal y como ha hecho la presidenta de Madrid, Miras no podría presentarse dado que la actual Ley del Estatuto del Presidente impide presentarse quien haya ejercido más de dos mandatos.
El líder del PP se enfrenta a los últimos momentos como presidente de la Comunidad, un cargo al que llegó en 2017 tras la dimisión de Pedro Antonio Sánchez y que revalidó en 2019 al formar gabinete con Ciudadanos. El primer gobierno de coalición de la historia de la Región tiene las horas contadas después de que Ciudadanos, socio el PP, haya decidido pactar con el PSOE para presentar una moción de censura.
Miras ha calificado la alianza de Ciudadanos con el PSOE como "una traición" y "una deslealtad". En su opinión, el pacto de Gobierno se rompe para satisfacer "una ambición personal". Y criticó que "se equivoca quien en un momento como este priorice el interés político a vencer la pandemia". En su opinión, "es mucho más que un error, es una falta de respeto para el millón y medio de personas entrar en un debate de sillones". Son, asegura, "intereses partidistas en el peor momento del último siglo de la Región".
"Este no es el momento", repitió el aún presidente. "La Región no se merece que jueguen con ella", declaró. "Y coincide con eso una amplia mayoría de la sociedad, porque los murcianos deben estar por encima de los intereses personales". Y apostilló: "En lugar de sumar esfuerzos, hay quien parece más interesado en lograr el poder al precio que sea".
El mandatario también manifestó que la Región "va a salir adelante de esta crisis, porque tiene capacidad para hacerlo". Para ello, agregó, "necesitaba estabilidad y que en las elecciones se les dé la posibilidad de elegir qué gobierno quieren". Pero, añadió, "este n oes el momento".