MURCIA. Las perspectivas no son ilusionantes. El repunte de contagios provocado por la variante Ómicron, un precio de la energía disparado que ya ha contagiado al resto de productos y una crisis global del transporte que está perjudicando las cadenas de suministros son algunos de los mayores obstáculos de la economía regional en el camino de su recuperación. A todo esto, también resulta necesario incluir las tensiones geopolíticas provocadas por el conflicto de Ucrania, pues los efectos en caso de que estalle una guerra abierta también alcanzarán a este extremo de Europa. No obstante, y pese a la complejidad de los enemigos, las empresas de la Región continúan remando para mantener el desarrollo, una meta alcanzada por todos los sectores.
Así se desprende del último barómetro publicado por el Colegio de Economistas de la Región de Murcia en el que se muestra un freno en la recuperación económica que, si bien trunca las esperanzas de un restablecimiento en V sí permite a al economía regional mantener unas expectativas positivas de crecimiento.
De hecho, en una escala de 1 (fuerte descenso) a 5 (fuerte crecimiento), encontramos casos como el de la logística y el transporte, que lidera el ranking con 3,36 puntos, seguido muy de cerca de las tecnologías de la información y la construcción con 3,33. No obstante, la verdadera noticia positiva para la economía regional radica en que todos los sectores mantienen unas previsiones al alza, con la única excepción del comercio minorista que muestra unos resultados límites de 2,48 puntos. En conjunto, la media muestra un incremento esperado de 3,07 puntos, una reducción de 0,25 respecto a los resultados de junio de 2021.
Por su parte, la situación económica personal en estos momentos resulta menos favorecedora que las expectativas de crecimiento por sectores. De hecho, un 14,2% manifiesta estar mejor, el 66% declaran encontrarse igual y un 19,8% elige la respuesta peor que en el semestre anterior, de forma que el balance resulta negativo. Esto se debe principalmente al descenso en el porcentaje de encuestados que han respondido "mejor" e "igual", pues estos ha descendido 2,7 y 2,1 puntos. En consecuencia, la opción "peor" ha ganado fuerza en esta misma proporción.
También las previsiones de la situación económica personal confirman la incertidumbre instalada entre los encuestados, pues un 17,9% espera que su situación mejore, mientras un 22,2% considera que su situación económica personal será peor en el próximo semestre.
Respecto a la situación global de la Región, esta sigue consiguiendo mejorar los resultados del conjunto de España, aunque no puede equipararse con las cifras de crecimiento de la Unión Europea. En concreto, la Comunidad murciana alcanza los 2,71 de valoración respecto a seis meses atrás, lo que la mantiene una décima por encima de España y dos por debajo de la UE.
En cualquier caso, las expectativas de futuro vuelven a quedar lastradas como consecuencia de todos los frentes abiertos en la economía regional, de forma solo consigue alcanzar unos resultados de 2,69 puntos. De todas formas, el pesimismo de los encuestados se ceba aún más con la economía nacional, que muestra unas cifras de 2,51 puntos, mientras que la UE se mantiene en un crecimiento esperado de 2,88.
En síntesis, aclaran los economistas, "se constata un deterioro en las expectativas de crecimiento en el próximo semestre, en sintonía con la sensibilidad que muestra la percepción de los encuestados respecto a la coyuntura económica y sanitaria".