MURCIA. Los conocidos como 'pinchazos' han marcado las fiestas de muchas ciudades de España este verano. Una especie de psicosis que ha hecho que las mujeres, sobre todo, se hayan visto lastradas y atenazadas por el miedo a la sumisión química. La Feria de Murcia no quiere que esa situación se repita y para evitarlo el Ayuntamiento ha preparado un dispositivo, que incluirá policías de paisano, para controlar las aglomeraciones y asegurar unas fiestas tranquilas.
Además habrá tres puntos violetas en el Cuartel de Artillería, la Fica y el centro de ocio Zig zag y agentes femeninas de la Policía recorrerán el recinto ferial de paisano. A este dispositivo se le sumará la vigilancia complementaria de 550 policías locales y otros tantos agentes de la Policía Nacional y Guardia Civil, así como drones con cámaras térmicas que determinen las zonas con mayores concentraciones y permitan la rápida actuación de los agentes.
Los voluntarios de Protección Civil contribuirán a la seguridad con la distribución de pulseras para identificar a los niños en caso de que se extravíen y con la creación de un centro de atención sanitaria en el que atenderán lesiones y trasladarán a quienes lo requieran a los centros hospitalarios.
Los diferentes servicios policiales planificados se verán reforzados con la vigilancia aérea de 2 drones, para el apoyo de los trabajos en tierra. Estos aparatos que están dotados de objetivos y cámaras térmicas, podrán determinar las zonas en las que se pudiera producir una mayor concentración de personas y al estar coordinados con los indicativos estáticos y de recorrido por los diferentes recintos festeros, permitirán garantizar intervenciones inmediatas en aras de la seguridad ciudadana.
Por su parte, el delegado del Gobierno, José Vélez, ha afirmado que en ninguno de los casos de denuncias por pinchazos en la Región de Murcia se han detectado sustancias en sangre, y ha asegurado que trabajarán para "que no se produzcan, y si se producen poder detener al que lo haga", como informa Efe.
Vélez ha añadido que el objetivo de esta estrategia de seguridad es el disfrute de las de las fiestas en la ciudad de Murcia con la garantía de que habrá un gran número de agentes "pendientes de la seguridad de los ciudadanos y visitantes".
En el recinto ferial se establece un dispositivo especial de seguridad con el que la Policía Local pretende garantizar que no se produce ningún tipo de incidente y todo se desarrolla con las necesarias garantías de seguridad. De ello se encargarán, con carácter específico, 14 policías, que patrullarán constantemente todo el recinto de la Feria, dotados de un chaleco policial que facilite su identificación. En caso necesario contarían con el apoyo del servicio ordinario, además de los refuerzos que se estimen adecuados.
Por otra parte, al igual que en años anteriores, se instalará una Oficina Móvil de Atención Policial. "Se pretende que esta oficina sirva de punto de referencia a los ciudadanos como información, posibilitando la prestación de cuantos servicios requiera el visitante", informan fuentes municipales.
En dicho dispositivo intervienen además, el Servicio de Bomberos y Protección Civil, que instalará un Centro de Atención sanitaria en el que también se repartirá pulseras para identificar a los niños en el caso de que se extravíen.
Respecto a las protestas de las asociaciones que han denunciado el uso indebido del parque de El Malecón durante las fiestas, Serrano ha asegurado que este año se ha realizado "un esfuerzo que no se ha hecho ningún otro año" trasladando el campamento de Moros y Cristianos al aparcamiento disuasorio para que no afecte a la flora del Jardín Botánico.