MURCIA. García-Carrión, la firma vinícola de origen jumillano propietaria de marcas como Don Simón o Pata Negra, acaba de completar un nuevo movimiento para mejorar la administración de su negocio. Para ello, ha disuelto 8 de sus filiales que han sido fusionadas en beneficio de otra sociedad del grupo que centralizará la gestión a partir de ahora.
En consecuencia, han desaparecido las empresas afincadas en Jumilla J. García Carrión Energy, Bodegas 1890 SA, la catalana Bodegas Jaume Serra, la castellanoleonesa Viña Arnaiz, las vascas Bodegas Marqués de Carrión y Bodegas y Viñedos Marqués de Carrión, la andaluza Cítricos del Andévalo y la manchega J. García Carrión La Mancha, todas ellas administradas por José García-Carrión Jordán.
En total, ocho empresas han sido absorbidas por Bodegas 1.890 SL, la sociedad beneficiaria de este movimiento que centralizará desde su sede en Jumilla la actividad que estaba repartida hasta ahora por toda España. De esta forma, la firma busca "agilizar su gestión administrativa y mercantil", según explican fuentes de García-Carrión a Murcia Plaza.
Esta fusión comenzó a gestarse en el verano del pasado 2022, cuando se presentaron en los registros mercantiles de las diferentes comunidades involucradas el proyecto común de integración. De hecho, fue aprobado el 10 de noviembre del mismo año, aunque no ha sido hasta este viernes 10 de febrero que se ha hecho efectivo con su publicación en el Boletín Oficial del Registro Mercantil (BORME).
En consecuencia, las ocho filiales afectadas ya han sido disueltas, mientras que todo su patrimonio ha sido transmitido en bloque a la sociedad beneficiaria, que adquiere por sucesión universal los derechos y obligaciones de las sociedades absorbidas.
Con el objetivo de preparar esta sociedad para concentrar ahora una mayor actividad, la compañía jumillana cesó el 2 de diciembre del 2022 a Antonio González Villacañas y a Francisco Abellán Semitiel, dos directores técnicos de García-Carrión que cumplían hasta ese momento la función de administradores mancomunados de la empresa. Así, la sociedad queda ahora en manos de José García-Carrión Jordán, CEO del grupo, en calidad de administrador único.
Este cambio no es el único que se ha producido en Bodegas 1890 SL, pues este nombre también resulta una novedad para la compañía. Al fin y al cabo, antes de la absorción de las ocho filiales la sociedad era conocida como J. García Carrión Jumilla SL.
Pese a que Bodegas 1890 SL gana relevancia dentro de la estructura, lo cierto es que esta no es la matriz en García-Carrión, sino que depende de J. García Carrión SA, sociedad dominante del grupo y firma que aporta la mayor parte de las ventas.
García-Carrión, la compañía vinícola con sede en Jumilla y propietaria de marcas como Don Simón o Pata Negra o Jaume Serra, continúa como la tercera empresa de mayor tamaño de la Región de Murcia por volumen de facturación, tan solo por detrás de Hefame y El Pozo.
En su caso, el 2021 resultó un año especialmente positivo que permitió un crecimiento de doble dígito (10%) y aupó sus resultados hasta los 941 millones de euros frente a los 854 millones con los que cerró el ejercicio del 2020. De esta forma, logró un beneficio de 45 millones, tres veces más que el año anterior.