CARTAGENA. La delicada situación del Mar Menor, especialmente desde hace 6 años aproximadamente, obliga a poner en vigilancia todos los aspectos de la laguna para intentar contener su deterioro mientras se dota al entorno natural de las herramientas necesarias para su regeneración. Por ello, la Comunidad sacó a licitación el seguimiento del fitoplancton potencialmente tóxico en aguas costeras de la Región de Murcia (Mar Menor y costa mediterránea). El contrato tiene un importe de 284.000 euros.
Según reza el pliego, "el objeto del contrato consiste en la vigilancia, mediante los correspondientes análisis y su interpretación técnico-científica, de los niveles de fitoplancton potencialmente tóxico en aguas costeras del Mediterráneo de la costa de la Región de Murcia y del Mar Menor, en especial al objeto de alertar de la forma más temprana posible de hipotéticos eventos tóxicos en aguas de baño con repercusiones en la salud de las personas. Esto se llevará a cabo recopilando los datos relativos de proliferaciones de fitoplancton y la determinación taxonómica de especies potencialmente tóxicas, así como datos derivados de los análisis de las concentraciones de toxinas en función de las densidades celulares; por un lado, durante la temporada de baño en playas del Mar Menor y del Mediterráneo, de forma más intensiva, y por otro, en aguas del interior del Mar Menor, de forma menos intensiva y durante todo el año".
Sin embargo, pese a que se esperaba que la adjudicación ya estuviera resuelta, se ha tenido que retirar el contrato "hasta que se determine nuevamente la forma de acreditar la solvencia técnica en cuanto a los medios materiales y personales precisos para su correcta ejecución". Desde la Consejería de Agricultura, señalan que el contrato se encuentra “dentro del proceso administrativo para la nueva contratación del servicio.
Las últimas semanas han mostrado, no obstante, una mejora en los niveles de oxígeno de la laguna. A poco más de una semana para el comienzo del verano, los niveles de los distintos parámetros son estables a diez días del comienzo del verano. El nivel de clorofila es similar al de 2021, con 0,63 mg/m3. "La presencia de fitoplacton es escasa, pero eso no quiere decir que en los próximos días pueda aumentar con el aumento de las temperaturas", señaló el portavoz del Comité de Asesoramiento Científico del Mar Menor, Emilio María Dolores. En este sentido, la temperatura actual del Mar Menor es de 25,73 grados, 0,7 por encima de la registrada en 2021. "Es probable que se alcancen los 30 grados en las próximas semanas".
En cuanto a los niveles de oxígeno y turbidez, los datos son esperanzadores. Los episodios de hipoxia detectados se dan por terminados. El nivel medio actual es de 7,17 mg/l. "La presencia de algas, especialmente la de la variante Chaetomorpha linum, permite incorporar oxígeno al agua a través de la fotosíntesis. La temperatura todavía no es muy elevada, por lo que la solubilidad del oxígeno es alta. Conforme sube la temperatura, la solubilidad baja y aparecen las zonas de hipoxia", explicó Emilio María Dolores. El nivel de turbidez ha bajado, estando ahora mismo en las 0,68 FTU (Unidad de Turbidez de Formazina), siendo inferior a la de 2021. "La ausencia de viento favorece que haya más transparencia", apunta el portavoz. En cuanto a la salinidad, aunque ha aumentado ligeramente, sigue estando por debajo de los parámetros normales (ahora es de 39,96, debiendo estar entre 40 y 47 PSU).