MURCIA (MP/EFE). El nuevo Plan Estratégico Regional ya ha echado a andar. Este documento marco elaborado por el Gobierno autonómico comprende el periodo de 2022 hasta 2027 y abarca diez grandes objetivos con una dotación total de 4.430 millones. En el decálogo de propósitos se encuentra el Mar Menor. La recuperación del entorno más apreciado de la Región contiene un apartado específico con una inversión prevista de hasta 170 millones que se desplegarán en tres líneas estratégicas y 13 actuaciones. La Comunidad, en concreto, busca intervenir en la ordenación del espacio de influencia de la laguna salada para reducir los vertidos contaminantes, así como quiere potenciar sus valores ambientales, usos y regeneración del ecosistema.
En total, el Plan Estratégico de la Región de Murcia para el periodo 2022-2027 supondrá una inversión de 4.430 millones para poner en marcha una decena de objetivos estratégicos, que incluyen el impulso a la innovación e internacionalización, el apoyo al sector turístico, la mejora de la sanidad y la educación, además de la propia regeneración del Mar Menor.
El presidente de la comunidad autónoma, Fernando López Miras, junto con el consejero de Hacienda, Luis Alberto Marín, ha presentado este lunes el plan que sentará las bases, indicaron, del diseño de las políticas regionales para un futuro más próspero y consiguiendo la máxima eficiencia en el gasto del presupuesto desde la libertad económica, la simplificación administrativa y la moderación fiscal.
El consejero Marín se ha encargado de desgranar los 10 objetivos estratégicos que incluye el plan, que a su vez se dividen en 62 líneas estratégicas con 370 actuaciones concretas.
Así, el primero de los objetivos es la mejora la competitividad a través de la innovación, para lo que se destinarán 590 millones de euros con el objetivo de transformar el modelo productivo regional dando un mayor protagonismo a la tecnología, el desarrollo de nuevos productos, la excelencia innovadora y el desarrollo del conocimiento.
Un segundo objetivo, dotado con 290 millones de euros, es el de profundizar en la internacionalización de la economía regional, extendiendo la actividad exportadora a más empresas y con productos de más valor añadido, captando nuevas inversiones extranjeras y favoreciendo la inversión mediante la agilización administrativa y burocrática, y la armonización fiscal.
Otros 320 millones de euros se destinarán a completar las conexiones exteriores y mejorar la conectividad con infraestructuras como el corredor mediterráneo, la conexión ferroviaria con Andalucía, así como a potenciar el aeropuerto internacional y el puerto de Cartagena.
El cuarto de los objetivos es el de optimizar los sistemas de gestión del agua y la energía, con 320 millones de euros para mejorar el aprovechamiento de los recursos hídricos para contribuir a un desarrollo energético más descarbonizado y con nuevas energías renovables.
En quinto lugar, el plan estratégico prevé promover un modelo turístico sostenible basado en aspectos diferenciadores del territorio, revitalizando el turismo de interior y mejorando el del litoral para favorecer la desestacionalización y la profesionalización del sector, para lo que se destinarán 120 millones de euros.
Una cuarta parte de los fondos con que está dotado este plan, 1.250 millones de euros, se destinarán a la mejora del sistema público de salud y dependencia, poniendo el foco en la salud preventiva y paliativa, mejorando la atención primaria, aumentando el número de profesionales y sus condiciones laborales para cubrir plazas de difícil cobertura y construyendo nuevos centros de atención a la salud mental, entre otras medidas.
Otra buena parte del presupuesto, 880 millones, se irán al séptimo de los objetivos, el de incrementar las capacidades del sistema de educación y formación reforzando los medios materiales y profesionales y poniendo especial énfasis en la formación dual generalizada.
El octavo de los objetivos pasa por integrar los procesos productivos y de bienestar haciendo el modelo productivo compatible con los objetivos ambientales a través de la ordenación territorial, la economía circular y la reducción de la contaminación, todo ello con 320 millones de euros.
La protección y regeneración ambiental del Mar Menor es el noveno de los objetivos del plan, y a ello se destinarán 170 millones de euros con los que intervenir en la ordenación del espacio de influencia de la laguna salada para reducir los vertidos contaminantes, y potenciar sus valores ambientales, usos y regeneración del ecosistema.
En último lugar, el plan prevé avanzar en la gobernanza pública, y modernizar las administraciones para avanzar en la simplificación, digitalización y transparencia, a lo que se destinarán 310 millones de euros.
El plan se evaluará cada tres años y tendrá un carácter “vivo y flexible”, ha dicho el consejero, para poder adaptarlo a las circunstancias de cada momento y conocer su grado de cumplimiento.
En el periodo 2022-2024 se harán la mitad de las inversiones previstas, 2.144 millones de euros y el objetivo final, ha señalado, será el de generar empleo y riqueza, fortalecer la competitividad empresarial, mejorar el aprovechamiento de los recursos, avanzar en digitalización, protección y recuperación del Mar Menor y mejorar el estado de bienestar para “conseguir ser una región más próspera, inclusiva, solidaria y sostenible”.