concierto de PromÚsica el 11 de mayo en el auditorio regional

Barbara Hendricks: "No quiero vivir en un mundo en el que se converse con el arte de forma artificial"

7/05/2023 - 

MURCIA. La cantante estadounidense Barbara Hendricks no es solo una de las grandes voces líricas de todos los tiempos; es también un ejemplo de superación y de activismo social. La soprano -distinguida con el Premio Príncipe de Asturias de las Artes y la Legión de Honor de Francia- vuelve a Murcia después de seis años de la mano de ProMúsica. Lo hará el jueves 11 de mayo, a las 20.00 horas, en el Auditorio Regional Víctor Villegas, con su concierto The road to freedom, un programa de blues, góspel y espirituales negros que evocan la lucha de los esclavos por la libertad y el fin de la segregación racial liderada por Luther King. 

The road to freedom es un espectáculo en el que la cantante, considerada como una de las mejores recitalistas del mundo, explicará en castellano el mensaje de estas letras con las que quiere transmitir que "si aprendemos a vivir juntos, como hermanos, podremos hacer algo maravilloso". Desde ProMúsica Murcia aseguran que será, sin duda, unos de los conciertos más singulares y emocionantes de los últimos años en la ciudad. Nacida en Arkansas en 1948 -y actualmente ciudadana sueca-, Barbara Hendricks es, además, embajadora de buena voluntad del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR). 

Estuvo usted en Murcia hace seis años y desde entonces han ocurrido muchas cosas, entre ellas una pandemia que nos ha cambiado a todos en muchos aspectos, una guerra en Ucrania, ahora Sudán… y siguen activos muchos conflictos y crisis migratorias en el mundo. ¿Cree que avanzamos en ese 'camino a la libertad' al que usted canta? ¿Podemos ser optimistas?

Los conflictos han estado ocurriendo siempre pero no teníamos la comunicación actual, que es instantánea. Ocurrían sin que mucha gente los supiese y sin salir en las noticias; incluso hace 25 años y en los mismos lugares. En primer lugar, pienso que si estás vivo debes luchar y ser activo. Mi generación ha vivido en una sala de estar de ensueño, en un maravilloso período de paz y prosperidad, especialmente en los países occidentales. Cuando tenía 20 años no era nadie y era difícil conseguir un trabajo, pero salíamos de la Universidad con el mundo por delante. Me considero parte de una generación muy afortunada y un poco mimada por la prosperidad y la paz que vivimos en el mundo occidental. Hoy en día siempre hay alguna cuestión que nos hace ir hacia atrás, haciendo que parezca que las cosas son irreversibles; pero entonces algo cambia todo. Cada generación tiene la responsabilidad de seguir moviéndose hacia adelante, tomando partido y luchando por lo que cree.

¿Es posible el Arte sin tomar partido, ética o políticamente, por una visión del mundo?

Yo puedo hablar desde mi punto de vista y para mí sería una cosa impensable. No solo soy una cantante, también soy una ciudadana. Tenía catorce años cuando obtuvimos el derecho a votar, algo de lo que nos aprovechamos para luchar por otros. Para mí, ciudadanía y libertad deberían ir juntas. Yo no me permito el lujo de vivir haciendo mi música aparte del mundo.

No me permito el lujo de vivir haciendo mi música aparte del mundo    

En Estados Unidos conviven multitud de personas que mantienen sus costumbres, culturas, estilos de vida… Desde España nos puede parecer que esa convivencia se ha dado en los últimos 40 o 50 años con una naturalidad (y una libertad) que faltaba en otros países. Sin embargo, se podría tener la impresión de que hay muchos asuntos, y graves, que no se han solucionado. ¿Cuál es su opinión al respecto? ¿Considera que hay diferencias entre Europa y USA en este sentido?

La armonía de la que habla no ha sido real. Hay diferencias, entre otras cuestiones porque históricamente siempre las ha habido. Estados Unidos se construyó sobre el exterminio de los pueblos nativos y a costa del trabajo esclavo, que es algo que se ha ocultado pero que siempre va a estar ahí. La tensión siempre ha estado ahí y vuelve. ¿Qué pasa si tienes lesiones que realmente no tratas y solo pones parches? La historia estadounidense es todo eso y ahora está regresando.

Diría que debido a los horrores de la Segunda Guerra Mundial, hubo un ajuste de cuentas de lo que había sucedido en muchos países europeos, especialmente en Alemania. Ningún lugar es perfecto -piensa lo que sucedió durante la dictadura en España-, pero si finges que es perfecto las cosas encontrarán la manera de volver a aparecer y probablemente de una forma peor que la anterior. Yo creo que uno de los problemas de Estados Unidos es que ha tenido los mejores relaciones públicas y si se veía algún problema era tratado como una especie de noticia falsa, como decimos hoy en día.

Una vida de activismo

Foto: Bengt Wanselius

¿Cómo ha condicionado su propia biografía, si es que lo ha hecho, su activismo social?

Por supuesto que lo ha hecho, ya que todos estamos condicionados por la vida que hemos tenido, incluso por la historia que nos ha precedido. La gente tiene el libre albedrío de aprender sobre lo que se vive y de decidir cómo nos vamos a comportar como seres humanos. Siendo una niña siempre fui consciente de las injusticias y eso ha ido aumentando. Crecí como testigo del movimiento de derechos civiles, siendo activa en el movimiento de mujeres como una joven universitaria, manifestándome contra la Guerra de Vietnam… En definitiva, mi pensamiento político se ha formado por mi propia historia. Las circunstancias de la vida, el haber nacido en un lugar concreto, determinan que tu vida va a ser muy diferente de alguien como tú que nació en un lugar distinto.

En Ucrania nadie podía imaginar hace 20 años que fuese a pasar lo que está ocurriendo ahora mismo. Son las incertidumbres de la vida. Esas cosas, simplemente, nos enseñan que nada es seguro. Creo que los valores y los principios que tenemos, que se basan en la Declaración Universal de los Derechos Humanos, incluyen que puedas no estar de acuerdo con alguien pero lo respetes como un ser humano. No vamos a estar nunca seguros de lo que va a suceder, de que vayamos a vivir en paz o con prosperidad, pero sí creo que los valores y los principios que tenemos están ahí cuando las cosas se ponen patas arriba y nos ayudan.

Usted dice que siempre ha tratado de mantener los ojos abiertos y buscar la luz. En una labor como la suya, tan cercana a los problemas sociales, conflictos bélicos, refugiados… ¿El coste emocional es alto? ¿Cómo puede sobrellevarlo?

Tienes que ser muy humilde. Yo no puedo arreglar el mundo, por mucho que quiera, por mucha energía que ponga y por mucho que me esfuerce. Pero me siento recompensada al saber que soy parte de un activismo, que otros están haciendo lo mismo, que estamos avanzando para crear una sociedad mejor para nuestros nietos y que ellos también están aprendiendo a luchar por ti.

mi carrera ha ascendido lentamente. Creo que hoy en día es más difícil para la gente joven, pues se les pide que hagan la cosas ya

¿Sigue las carreras de otros cantantes? ¿Cómo se encuentra 'el estado del arte' de la lírica en el panorama internacional? ¿Cree que las nuevas generaciones, tanto de cantantes como de público, garantizarán el vigor de la ópera y la lírica en el futuro?

Voy a conciertos y óperas, y siempre encuentras hermosas voces y talentos maravillosos, pero realmente no sigo la carrera de otros cantantes. Yo he tenido la suerte de tener una carrera que ha crecido lentamente, aprendiendo poco a poco y recibiendo los consejos de directores sobre qué repertorio aprender. Gracias a eso he ido ascendiendo lentamente. Creo que hoy en día mis colegas no tienen esa suerte; es más difícil para la gente joven, pues se les pide que hagan la cosas hoy y ya. Realmente no puedes aconsejar a las nuevas generaciones, ya que todo lo que se hacía antes y se necesitaba antes no se requiera ahora. El único consejo que puedo darles es que lo hagan lo mejor que puedan y que cuando estén en el escenario luchen por su música. Cada generación encontrará su manera, porque si naces para ser un artista tienes que defender lo que estás haciendo, aunque no siempre sea fácil.

De su larga lista de interpretaciones para la ópera o como recitalista hasta ahora ¿recuerda algún momento especialmente decisivo o emocionante sobre el escenario?

Hay muchos, pero tal vez un concierto durante la guerra en Yugoslavia, en 1993, cuando los músicos a pesar de todo querían seguir haciendo música. Empezaron a tocar el Ave María de Schubert. Yo siempre ensayo de cara a la orquesta y cuando empezó a sonar les miraba a la cara y no quería llorar,… no había ido para eso. Así que cerré los ojos y canté. Cuando los abrí, la energía era increíble. Fue un momento mágico, tener esta conexión musical a pesar de esos duros momentos.

Mirar hacia la luz

Foto: Fernand Fourcade

¿Por qué un día decide hacer jazz?

Todo empezó por casualidad en el Festival de Jazz de Montreaux con el director y fundador de éste, Claude Nobs. Quería hacerle un tributo a Duke Ellington. Me llevó dos años prepararme para trabajar con diversos músicos con los que contacté. Hicimos alguna gira y grabamos y entonces decidí empezar desde el principio como una estudiante. El programa que llevo a Murcia empezó cuando mi agente española Almudena me llevó a un festival de gospel. En el origen está la música de los esclavos, que en un principio eran a capela; el gospel se hizo mucho más tarde con instrumentos y se desarrolló a lo largo de los años. Puse juntas diversas canciones que recordaba y otras que me gustaban. Cuando comencé a hacerlo, me di cuenta que tenía que darle algunas herramientas a la gente para entender de donde venían esas canciones y decidí añadir notas sobre el mensaje de amor del que habla Martin Luther King. El mensaje que se transmite, en definitiva, es que si no aprendemos a vivir juntos como hermanos y hermanas en esta Tierra, pereceremos juntos.

Las artes, en general, se han democratizado de una manera vertiginosa, sobre todo con la irrupción de las nuevas tecnologías. ¿Qué piensa usted acerca del impacto de la tecnología en la música (en nuestras vidas…), sobre todo cuando parece ser que una IA puede suplantar a un cantante sin que nadie lo note?

No se mucho acerca de que puede hacer la tecnología. El arte es una conversación que hemos tenido desde el comienzo de la humanidad. El ser humano es el único animal capaz de tener un diálogo con el arte. Somos capaces de conectar con unas simples pinturas realizadas hace millones de años, por ejemplo. No quiero vivir en un mundo donde esta conversación este hecha de manera artificial.

¿Qué es 'The Road to Freedom' y que mensaje quiere ofrecer al público que la escuchará?

El mensaje es que si aprendemos a vivir juntos, como hermanos, podremos hacer algo maravilloso. Tenemos que mirar hacia la luz. No somos artificiales, somos seres humanos y tenemos que mantenernos cerca entre nosotros.

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