Fotos: ATP TOUR
MURCIA. Sabiendo sufrir por momentos y gustándose en otros. Así ha conseguido Carlos Alcaraz Garfia su pase a la segunda ronda del Abierto de Estados Unidos al ganar a Sebastián Báez por 7-5, 7-5, 2-0 y retirada por lesión del argentino después de 2 horas y 31 minutos de una disputa durísima, emocionante y con un buen puñado de acciones espectaculares por parte de ambos jugadores. El murciano, de 19 años y cuarto jugador del mundo -tercer cabeza de serie en el cuarto y último Grand Slam de la temporada-, se ha impuesto en un duelo entre chavales que están llamados a dar que hablar en los próximos años y tendrá como próximo adversario al que resulte vencedor de la confrontación entre el neerlandés Tallon Griekspoor y el también argentino Federico Coria.
Báez, un menudo tenista de apenas 1,70 de estatura pero petreo en su físico y en su juego, no iba a ser un rival ni mucho menos sencillo, tal y como se esperaba.
El de San Martín, de 21 años y número 37 de la clasificación internacional, quien ya perdió contra Alcaraz en las Next Gen ATP Finals en Milán en noviembre de 2021 (4-2, 4-1 y 4-2), opuso muchísima resistencia desde el comienzo.
La pista Arthur Ashe, la central de Flushing Meadows, quie es la más grande del circuito tenístico, asistió a un choque espectacular digno de una ronda más adelantada en el cuadro.
Alcaraz, quien se presentaba con un bagaje de 44 victorias y 9 derrotas este año y 14-4 en pista rápida, estaba avisado viendo lo que le ocurrió al griego Stefanos Tsitsipas, quien era uno de los favoritos al título y ya está fuera del torneo.
Tras las grandes sensaciones del pasado año, cuando se asomó a la élite mundial alcanzando los cuartos de final en su primera presencia en Nueva York, comenzó con brío.
Perdió el primer punto, pero ganó los cuatro siguientes para llevarse el juego inicial al saque. En el segundo Alcaraz tuvo su primera bola de break, que no aprovechó, y cada tenista fue sacando adelante su servicio con Carlos llevando la iniciativa y poniendo el 3-2 a pesar de cometer dos dobles faltas y el 4-3 y el 5-4 también con apuros llegando a levantar un 0-30.
El encuentro estaba siendo un intercambio de cañonazos desde el fondo de la pista con alguna subida más por parte del español, que eligió mal el golpe varias veces.
Pese a vérsele demasiado cómodo el pupilo de Juan Carlos Ferrero sí supo jugar los puntos decisivos.
El 6-5 lo obtuvo con más solvencia y, al resto, dispuso de la segunda pelota de ruptura en el encuentro. Y esta sí la hizo buena con un gran derechazo después de 51 minutos de intensa batalla.
El de El Palmar siguió con la inercia positiva y suyos fueron los siete primeros puntos del segundo set, el cual comenzó con un 2-0 a favor, con su segundo break consecutivo.
Alcaraz, no obstante, se atascó con su saque y concedió a Báez sus tres primeras bolas de ruptura, las tres seguidas. Alcaraz las salvó primero con una dejada marca de la casa, luego con un fallo rival y finalmente con un remate en la red.
Parecía superado el apuro en lo que estaba convirtiéndose en un partidazo por parte de ambos jugadores, pero en un juego que duró casi un cuarto de hora y que dejó golpes extraordinarios el argentino tuvo otras dos opciones de ruptura hasta que por fin logró su propósito.
El choque mantuvo el nivel con Báez igualando a dos, aunque Alcaraz no se descompuso. Logró el 3-2 gastándose bastante menos, lo mismo que hizo Sebastián para el 3-3.
El séptimo juego de esta manga volvió a poner a Alcaraz en un aprieto (0-40 sacando) y, aunque respondió con aplomo, acabó cediendo. Salvó otra bola de break con un golpe ganador haciendo pasar la pelota entre las piernas, pero le faltó tranquilidad para cerrar el juego y Báez se lo volvió a llevar al resto.
El bonaerense iba lanzado pero el palmareño cortó su racha para establecer el 4-4 con un oportunísimo contra break.
A su reacción le dio continuidad por fin echando la bola al aire y se dispuso a restar para ganar el set. Sin embargo, su oponente se mostró sólido para resistir.
Como ocurrió en el primer parcial Carlos sacó lo mejor de su amplio repertorio en el momento cumbre del segundo, pero la combatividad de Báez no se lo iba a poner fácil. En su cuarta bola de set llegó el grito de Carlos tras otro derechazo inalcanzable para nadie. Una hora y 23 minutos para el 2-0.
Poco más duraría el encuentro, en concreto 17 minutos, porque en el tercer parcial, con los dos primeros juegos ganados ya por el español, Sebastián Báez se quedó clavado en una subida a la red y la lesión le obligó a dejar la pista después de una contienda en la que Alcaraz sumó 99 puntos y Báez 85.
"El partido no merecía un final así", dijo el de El Palmar tras un choque en el que, como también admitió, lo pasó "mal" en el segundo set, en el que resultó "difícil mantener el nivel en lo físico y en lo mental".
Así se expresó Carlos, "encantado de volver al US Open", en el que ya espera a su próximo rival, que saldrá del enfrentamiento entre Griekspoor, de 26 años y 46 del mundo; y Coria, de 30 y que ocupa el puesto 78.