Foto: Juanchi LópezMURCIA. Como una bumerán que siempre vuelve al punto de partida. Así se podría calificar el comportamiento del coronavirus en cuanto a la incidencia de contagios en el municipio de Murcia se refiere. Y el lanzamiento sería desde los barrios del centro como El Carmen y Barriomar, Floridablanca, Vistabella o San Andrés, que tradicionalmente han sido las zonas con la Incidencia Acumulada (IA) -casos por cada 100.000 habitantes- más alta.
Si la semana pasada la carga de contagios viró ahora hacia las pedanías de la zona sur, como El Palmar o Sangonera, en la última semana completa recogida en el estudio Epidemiológico de la Consejería de Salud (del 2 al 8 de noviembre) la incidencia más alta ha vuelto a estar en Vistabella y el Barrio del Carmen, con un índice de 524,8 y 480,3, respectivamente.
El virus continúa azotando la Región y cebándose especialmente con el municipio de Murcia, que día a día está a la cabeza de contagios. Que lidere esta nada halagüeña lista puede ser lógico, al menos estadísticamente, ya que es el más poblado de la Región. Donde los positivos han aumentado de forma más llamativa y preocupante es en Vistabella (con una población de 14.864 habitantes), sólo en la última semana se detectaron 78 casos y una incidencia de casi 525, que es la más alta de todo el municipio y tres veces superior a siete días antes.
En el caso del Barrio del Carmen (16.447 habitantes), en el mismo periodo temporal se habían contagiado 79 personas, lo que lleva la IA a 443,7 por cada cien mil habitantes, tres veces más que una semana antes. Otro barrio con una alta incidencia es Vista Alegre con 471,2 de incidencia y 75 positivos.
El estudio Epidemiológico de la Consejería de Salud, que recoge datos desde el 10 de mayo e incluye Alcantarilla, muestra que 1.236 personas se han contagiado en las dos últimas semanas en la capital. En los últimos seis meses los casos acumulados en el municipio son casi 13.000 (12.710).
Si se puede sacar algo positivo en los últimos días es que parece que se está aplacando la curva de contagios. "Estamos viendo una ligera disminución en la incidencia en los casos detectados. Espero que la semana que viene ya podamos ver el descenso de la incidencia en la comunidad, que ahora se encuentra prácticamente en una fase de meseta". Estas palabras del consejero de Salud, Manuel Villegas, suponían un halo de esperanza ante la incidencia tan alta de positivos que sigue dándose en la Región.
Un cambio de tendencia que se da a las dos semanas de que se decretase el toque de queda y el doble cierre perimetral de la Región y una semana después del cerrojazo a la hostelería. Otra noticia positiva es el avance en la vacuna de Pfizer para la covid-19: es un "auténtico rayo de esperanza" y "la luz al final del túnel", pero "no nos puede llevar a la relajación, sino todo lo contrario, es el momento para resistir y ahora mas que nunca", como remarcaba Villegas.
Por edades, la media en los 13.205 casos confirmados desde el inicio de la pandemia en marzo es de 39 años (38 en hombres y 39 en mujeres) y el 53,2% de los casos confirmados son mujeres, recoge el Informe Epidemiológico. Los jóvenes, y más concretamente los de la franja de edad de entre 15 y 29 años, son los que centran los contagios y aunque en la gran mayoría de las ocasiones son asintomáticos, su papel en la propagación del virus es el de vectores principales.
En la última semana reflejada en el estudio epidemiológico, el 21,5% de los casos estaban concentrados en esa franja de edad, con 620 positivos en Murcia. Los vecinos del municipio de entre 40 y 49 años concentran el 12,9% de los contagios, con 468 en una semana, y 1.119 desde principios de mayo.
