Foto: EDUARDO MANZANA. MURCIA. Las licitaciones vacías continúan aumentando en la Comunidad murciana a causa del desajuste en los precios. Así lo certifican desde la Federación Regional de Empresarios de la Construcción (Frecom), que maneja unas cifras de 33 convocatorias de obra pública que han quedado desiertas o desistidas en el último año, lo que supone un valor acumulado que ronda los 31,4 millones de euros.
"El problema continúa. No ha desaparecido", señala el secretario general de la organización, Alejandro Zamora, en conversaciones con Murcia Plaza. Lamenta así que el sector se encuentre en una situación similar al segundo trimestre del año, cuando comenzó a acusarse una tendencia que dio comienzo en octubre del pasado 2021.
En concreto, el desajuste se produce debido al incremento del coste de la obra -cifrado en un 33% según los últimos cálculos de la Confederación Nacional de la Construcción (CNC)-, pues desde que se publica la licitación hasta que se ejecuta el importe previsto queda "desfasado".
Para paliar este problema se aprobó un real decreto que permite revisar los precios de cuatro materiales -acero, aluminio, bituminoso y cobre-. No obstante, otros elementos encarecedores como la electricidad no se contempla: "Los mecanismos para paliar la situación no está sirviendo, porque el 95% de las obras quedan fuera de la actualización. Las administración está siendo muy lenta, cuando no inoperativa", remarca Zamora.
Además de las licitaciones desiertas, aquellas en las que no participa ninguna empresa- los 31,4 millones incluyen los desistimientos, es decir, los concursos retirados por la propia administración al quedar el precio por debajo del mercado con la intención de volver a realizar la licitación más adelante con las condiciones ajustadas.
Un caso similar tuvo lugar con la construcción de un edificio de vivienda pública en El Carmen, que fue adjudicada por 346.907 euros a un empresario ciezano a finales del 2021. No obstante, la obra no se llevó a cabo debido a la renuncia del constructor, por lo que volvió a salir a concurso con un importe de 448.261 euros.
Respecto a las licitaciones desiertas, el último concurso en quedar vacío ha sido el de las obras para la remodelación y acondicionamiento de la avenida Nuestra Señora de la Asunción, en Jumilla, que estaba presupuestado en 620.000 euros.
Esta situación se produce en un momento de especial actividad para la obra pública local -aquella fomentada por los ayuntamientos y la Comunidad- pues ha alzando en el primer semestre del 2022 unas cifras no vistas desde el 2010.
En concreto, la licitación regional y municipal ha alcanzado los 190 millones de euros en el primer semestre del año. Mayo, de hecho, deparó hasta 97 millones de euros en licitaciones. Así las cosas, los 190 millones suponen un amento considerable del 65% con respecto al mismo periodo del año pasado, que se saldó con 114 millones.
No obstante, desde el sector no tienen la percepción de que se esté materializando este incremento en los proyectos en un aumento en la actividad, pues a las licitaciones desiertas se suman aquellas que "se están demorando en el tiempo". Según critica Zamora, ha aumentado la cantidad de concursos cuya ejecución se ha ido posponiendo, en buena parte con la intención de ser revisados y buscar alternativas, lo que ha propiciado que se puedan retrasar: "El aumento en los concursos no está impactando en el sector", subraya.
