CARTAGENA. La muerte de Elena Lledó, presidenta de la Asociación de Vecinos de Los Urrutias, ha provocado una enorme conmoción en diputación costera. Su fallecimiento deja huérfano el trabajo en defensa del Mar Menor que venía desarrollando a lo largo de los dos últimos años, desde que fuera nombrada representante de los vecinos en 2019.
Elena fue una abanderada y firme luchadora por su pueblo y no dejó ni un instante de reivindicar el bienestar de sus convecinos, pero, también que “su Mar Menor”, como ella lo llamaba, volviese a ser una laguna vital. “Es ahora o nunca, el Mar Menor no se merece este castigo”, decía la representante vecinal hace unos meses, cuando exigía soluciones a los políticos por el mal estado de la laguna.
Sus reivindicaciones no dejaron a nadie indiferente. Trató en todo momento de buscar lo mejor desde el cargo de representante vecinal, independientemente del color político de ese momento en cada una de las instituciones. Fue capaz de remangarse como la primera para pedir más parques, jardines, luchar contra la ola de robos o pelear por una parada de autobús escolar en condiciones: nada la detuvo en defensa de los suyos.
Lledó deja un enorme vacío entre sus familiares, vecinos y amigos, por su gran empuje, empeño e insistencia en poner soluciones en el día a día de los que la rodeaban.