MURCIA. "Vamos a pasar un ratico agradable, muy íntimo, muy en familia, repasando esas canciones que están en el imaginario de todos, con las que hemos crecido y que en su momento interpretaron grandes mujeres, valientes y poderosas". De esta forma describe la actriz murciana Pepa Aniorte el espectáculo musical Diez mujeres de cine, que pondrá en escena este sábado (20.30 horas) en la Fundación Mediterráneo en Murcia, dentro del ciclo 'Voces de Mujer'. Rinde así, dice modesta, "un humilde homenaje" a grandes estrellas de la interpretación que han cantado en películas, pero también a cantantes que en un momento dado actuaron en la gran pantalla. Ellas son Lola Flores, Marisol, Sara Montiel, Isabel Pantoja, Rocío Dúrcal, Karina, Concha Velasco, Gracita Morales, Marisa Paredes, Penélope Cruz y Lina Morgan, quienes inmortalizaron unas canciones que la murciana -la popular Choni de Los Serranos que no ha dejado de acompañarnos desde entonces en la televisión y el cine-, versionará con el acompañamiento al piano de Ángel Valdegrama.
En Diez mujeres de cine, un espectáculo que has creado tú misma, muestras una faceta más desconocida para el público que es el de Pepa Aniorte cantante. ¿Cómo surgió esta aventura musical?
Es un sencillo y pequeño homenaje a las mujeres del cine musical español. Es como pasearme un poco por esas canciones que interpretaron artistas polivalentes y versátiles, que han interpretado, han cantado, han bailado y han llenado un escenario al igual que una pantalla. La verdad es que todas ellas son artistas muy reconocidas, pero se me ocurrió este homenaje un día pensando que, ahora que se habla tanto del empoderamiento, ellas han sido mujeres muy poderosas a pesar de los tiempos que les tocó vivir y de haber haber sido muy criticadas. Fueron mujeres valientes, que salieron adelante con una fuerza tremenda; mujeres luchadoras y fuertes, que no respondían a los cánones de la época. Me parece que es bonito recordarlo. En este espectáculo hago un repaso desde los años 50 al cine de hoy en día, de una manera agradable, a través de la música, recordando canciones de nuestra historia que están en el recuerdo de todos.
¿Te sientes identificada especialmente con alguna de estas artistas a las que rindes homenaje?
Solo en que algunas de ellas eran actrices que cantaban, como me pasa a mí, aunque otras eran cantantes que actuaron. Pero no en cuanto que la mayoría eran grandes estrellas. Sí que me podría sentir más indentificada con otras 'secundarias eternas', de las que también hago un pequeño recorrido, como Gracita Morales, Esperanza Roy o Rafael Aparicio. Nunca fueron estrellas como Sara Montiel o Lola Flores, pero toda la vida se dedicaron al teatro y a la televisión, y fueron personajes que nos acompañaron durante muchos momentos de nuestra vida.
Muchos no saben que cantabas en verbenas cuando estabas estudiando Arte Dramático, que fuiste cantante antes que actriz.
La primera vez que yo me subí a un escenario fue para cantar, la música fue la primera que me dio la oportunidad. La verdad es que me tiré trece años cantando en orquestas de la Región, con las que fui por toda España, pero yo me daba cuenta en el escenario de que a mí lo que me apetecía era interpretar. No tengo una voz prodigiosa en absoluto, simplemente tengo oído y me gusta mucho cantar, pero sobre todo tenía una necesidad de interpretar. Ya de ahí me metí a la Escuela Arte Dramático y compaginé los estudios con las orquestas, que era lo que me daba el dinero para las matrículas y para más tarde dar el paso de irme a Madrid.
Te marchaste fuera de la Región para tener una carrera como actriz. ¿Por qué crees que en Murcia no se hace más cine?
Pues mira, yo no sé porque no se hacen más rodaje; no sé si depende un poco de que no haya más productoras que den el paso como, por ejemplo, las que están detrás de un proyecto maravilloso murciano como es Últimas voluntades o porque se ven con muchas dificultades a la hora de producir por estar todo muy centralizado en Madrid. Pero me parece que la Región tiene algo súper bueno y que es una ventaja con respecto a otros sitios de España, que es el clima, con muchas horas de sol y pocas lluvias, que estropean mucho un rodaje. Aquí puedes estar rodando con buena luz hasta las seis de la tarde en invierno. Aparte, es una región que tiene todo: mar, playa, montaña, huerta...
Oyéndote, casi que deberían ficharte para promocionarnos...
A mí me encantaría, yo lo comento mucho con los productores: vámonos a rodar a Murcia, que hace menos frío que aquí y tenemos de todo lo que necesitemos. Lo que sí echo de menos es una tele en la Región más fuerte, que haga ficción y producciones locales, que sería un paso importante para mostrar el talento murciano y facilitar que se pudiera dar el salto. Daría cabida a muchos actores y directores que salen de la Escuela.
Ahora mismo trabajas en una serie diaria en TVE, Servir y proteger. ¿Qué otros proyectos tienes a la vista?
En este momento, estoy compaginando Servir y proteger con la grabación de otra serie de TVE, la tercera entrega de La Caza (La Caza. Guadiana) -cuyo guionista es el lorquino Agustín Martínez- y los bolos que van saliendo de Diez mujeres de cine. Estoy con mucho trabajo y muy contenta, la verdad.
Actores, incluso premiados con un Goya, se han quejado de no tener trabajo en momentos determinados ¿Compararías la profesión de actor con una especie de montaña rusa?
Yo tengo que decir que tengo mucha suerte, porque me ha pasado muy poco. A lo mejor he estado sin trabajo uno o dos meses, pero sabiendo que me esperaba otra producción al poco tiempo. He tenido mucha suerte, pero tengo que decir que fue después de encontrar mi primer trabajo en televisión, porque hasta ese momento pasé seis años en Madrid haciendo un poco de todo: limpiando casas, vendiendo libros o poniendo copas... Pero es verdad que cuando estás terminando una serie o una película, piensas: ¿me volverá a querer el público? ¿me volverán a querer los directores? Pero esto es así y cuando eliges esta profesión lo sabes. Nadie está preparado para quedarse sin trabajo, pero esta profesión tiene un componente emocional, que es gustar o no a la gente.
Después de tantos papeles en televisión, como aquel entrañable de la Choni en Los Serranos, y de haber trabajados en cine con algunos de los mejores directores españoles, ¿qué te queda por hacer?
Hacer una mala malísima. ¡Tengo unas ganas! Nunca o muy pocas veces me dan este tipo de personajes. Me gustaría hacerlo sobre todo por estudiar cómo una persona llega a ser malvada, a disfrutar haciendo el mal, y conocer cuál es su motivación, porque yo creo que nadie es nétamente bueno o malo. Investigar un personaje así me gustaría mucho.