MURCIA. Murcia Río y Conexión Sur han sido reconocidos a nivel nacional por su sostenibilidad y el aprovechamiento del agua gracias al proyecto de jardines de lluvia en torno al Segura y en el bulevar verde. El Concejal de Desarrollo Urbano y Ciudad Inteligente, José Guillén, ha recibido este miércoles en el Museo Reina Sofía de Madrid el prestigioso galardón 'Sustainability Actions' otorgado al Ayuntamiento de Murcia por este proyecto.
Estos premios, concedidos por 'Compromiso RSE' y que alcanzan este año su IV edición, reconocen iniciativas pioneras en materia de sostenibilidad llevadas a cabo tanto por las administraciones públicas como por empresas, ONG, asociaciones y fundaciones. Los 'Sustainability Actions' se entregan en el marco del 'Sustainability Day' y se configuran como galardones de referencia en materia de sostenibilidad, reconociendo el carácter innovador y transformador de los distintos proyectos a nivel nacional, convirtiéndolos en ejemplo para el resto del país.
Con este premio, Murcia Río y Conexión Sur, además de su carácter transformador que ha permitido convertir una barrera natural como el Segura y una artificial como las vías en ejes vertebradores de la ciudad, se consolida también como referente en materia de renaturalización y aprovechamiento del agua.
Guillén ha indicado que "este galardón es un reconocimiento al esfuerzo de todo el equipo del Ayuntamiento de Murcia y un incentivo para seguir desarrollando proyectos innovadores que no solo protegen nuestro entorno, sino que también mejoran la calidad de vida de las generaciones presentes y futuras. Los 'Jardines de lluvia' son solo el comienzo de lo que esperamos sea una transformación sostenible a largo plazo en nuestra ciudad".
El proyecto de los jardines de lluvia que sido premiado en esta edición, consolida la apuesta de Murcia por los SUDS (sistemas urbanos de drenaje sostenible), que permite, mediante soluciones basadas en la naturaleza, reducir las inundaciones y los efectos de las mismas, al tiempo que se permite su reutilización, ya que están diseñados para que puedan inundarse cuando las lluvias son abundantes.
Por ello, son construidos en zonas bajas, de forma que captan el agua de las precipitaciones de sus alrededores y quedan anegados, pero van filtrando poco a poco el agua que han acumulado hacia colectores auxiliares, situados, generalmente, bajo los jardines, y de ahí puede pasar al sistema de gestión de aguas.
Constituyen, además, un aliado frente a los efectos de las lluvias torrenciales y la escasez de agua, ya que configuran un terreno permeable que permite filtrar y retener el agua, evitando con ello inundaciones y escorrentías, así como el posterior uso de esa agua en el riego, lo que reduce el consumo.
Se logra, además, una importante mejora estética y ambiental mediante la revegetación de la ciudad, logrando con ello una reducción del efecto 'isla de calor', y la aplicación de criterios de economía circular.
En los últimos meses se ha reforzado la apuesta iniciada en 2015 por estos sistemas y la creación de una ciudad más verde, sostenible y amable, contemplándose su implantación en los nuevos desarrollos, así como en proyectos estratégicos como el Parque Metropolitano, habiéndose implantado ya en otras actuaciones como el corredor verde.