MURCIA. La Región de Murcia se adentra en una nueva era, bautizada de nuevo como 'desescalada'. El objetivo es llegar a Navidad y poder celebrar las fiestas con los familiares. Así lo manifestó el presidente de la Comunidad, Fernando López Miras, tras una reunión del Comité de Seguimiento Covid-19 que, además de decidir qué municipios pueden reabrir sus bares, ha cambiado los criterios de evaluación de la pandemia.
A partir de ahora se primarán dos grandes condiciones: la incidencia acumulada y la presión asistencial de los hospitales. Ambos baremos, que han sido consensuados con el Ministerio de Sanidad, estarán en permanente revisión y se analizarán todos los lunes. Es el día fijado para establecer qué localidades avanzan y cuáles no.
El primer factor será el de la tasa de contagios por cada 100.000 habitantes, que recogerá las dos últimas semanas. Abarcará cuatro niveles: baja (menos de 75 casos por cada 100.000 vecinos), media (entre 75 y 250), alta (superior a 250) o muy alta (más de 500).
El segundo factor serán las fases. Se establece una fase 1 y una fase 2. La Región se situará ahora mismo en fase 2, ya que la Comunidad suma 571 contagiados hospitalizados, de los que 109 pacientes covid-19 se encuentran en la UCI. Para pasar de fase 2 a fase 1 hay que bajar de los 400 ingresos o tener menos de 100 enfermos en la UCI.
Las restricciones se ejecutarán tomando como referencia la incidencia acumulada de casos positivos a los 7 días de la última semana epidemiológica, y para levantar las mismas se adoptará el indicador de los últimos 14 días, según explican desde la Consejería de Salud. La tasa se basará en los parámetros del Ministerio, no del Gobierno regional.
Murcia, Cartagena y Lorca tendrá una modulación particular, dado el tamaño de sus poblaciones. Esto significa, según explicó el portavoz del Comité, que si se acercan a los umbrales se podrán tomar medidas con antelación para evitar riesgos.
Así las cosas, desde este sábado se permitirá la reapertura al 100% de las terrazas en Águilas, Ulea y Ojós, tres municipios cuya transmisión del coronavirus es media. Y podrán reabrir al 75% en Cartagena, Molina de Segura, Santomera, Beniel, Abarán, Lorquí y Pliego, pues reúnen actualmente una transmisión alta.
Todos los detalles se recogerán en un documento técnico que será publicado. La Región, además, seguirá cerrada perimetralmente otras dos semanas, hasta, al menos, el 9 de diciembre, lo que afectaría al puente de la Constitución. "Debemos seguir siendo prudentes", indicó el presidente Fernando López.
Miras avanzó que será una "desescalada lenta" porque la presión hospitalaria, a día de hoy, sigue siendo más alta de la deseada. "La situación es preocupante", admitió. "No podemos volver a la vida de enero ni febrero, ni tampoco a julio ni agosto. No es así". El mandatario señaló que no se atreve a aventurar si se ampliarán el número de personas para las reuniones de cara al final de año, pero sí se marcó como objetivo "poder tener una Navidad lo más parecida posible" a la de todos los años siempre y cuando "se mantenga una actitud responsable".
El jefe del Ejecutivo regional destacó que las restricciones adoptadas en la Comunidad han surtido efecto y remarcó que los contagios "se han frenado un 30%" en la última semana. "El sacrificio ha dado resultado". subrayó, refiriéndose al cierre de la hostelería y a las peticiones de confinamientos voluntarios. La tasa de positividad ha bajado del 12% al 8% y se han registrado más curados (5.200) que nuevos casos (3.901).
La tasa de incidencia actual se encuentra en 599 casos por cada 100.000 habitantes, según las dos últimas semanas. "La curva está estabilizada, incluso bajando ya, según dicen los expertos", manifestó Miras, añadiendo que las medidas que les aconsejaron los técnicos han dado sus frutos.