MURCIA. Llamadas desde Moscú, de Luis Alejandro Yero, se hizo con el Premio al Mejor Largometraje de Sección Oficial de la decimocuarta edición del Festival Internacional de Cine de Murcia IBAFF, que se ha clausurado este sábado. El director cubano consiguió el galardón -dotado con 10.000 euros de premio- con un ensayo fílmico de poco más de una hora (65') en el que coloca su mirada en cuatro exiliados que buscan asilo político en Moscú poco antes de que la invasión de Ucrania sea anunciada. Una trama hilada a través de una serie de llamadas telefónicas en las que conviven presente y futuro: sus resistencias como inmigrantes queer e irregulares y los intercambios con el director de la película tras el estallido de la guerra.
La decisión del jurado profesional -integrado por Patxi Burillo, Irene M. Borrego y Daniela Urzola- fue tomada por unanimidad por "su manera acertada de articular la forma con un discurso político, potente y actual, que con pocos elementos consigue retratar el espíritu colectivo de una comunidad marcada por la tensión entre aislamiento e hiperconexión".
Por su parte, los espectadores de esta edición del IBAFF, que ha contado con récord de asistencia en sala y de participación ciudadana con su voluntariado, reuniendo centenares de personas cada tarde en la Filmoteca Regional, decidió otorgar el Premio del Público al Mejor Largometraje a Don't expect too much of the end of the world, del cineasta rumano Radu Jude. Un retrato no sólo de la realidad de la sociedad actual sino también de su reflejo en los medios de comunicación. Una película muy autorreflexiva sobre lo que significan las imágenes y lo que puede ser el cine hoy en día.
En cuanto a los cortos, el Premio al Mejor Cortometraje de Sección Oficial-con una cuantía de 6.000 euros- fue para Postadolescencia, de Claudia Negro. El jurado profesional de cortometraje -integrado por Martín Cuesta, Inés Calero y Alfonso Palazón- consideró, también por unanimidad, que el filme de la directora madrileña merecía el galardón por "el uso de una multiplicidad de materiales, tanto propios como ajenos, para construir las contradicciones de una generación, atrapada entre una niñez añorada y una madurez que nunca llega". Un ensayo autorreferencial que reflexiona acerca de la confusión identitaria de la autora referida a una nomenclatura respecto a la edad que ha quedado obsoleta.
El Premio del Público para el Mejor Cortometraje recayó en Sé de un lugar de los murcianos Antonio Conesa y Emilio Hupe. Una pieza que orbita alrededor de una pareja de jóvenes que deciden dejar atrás su hogar para buscar oportunidades de futuro y cómo se enfrentan a las dificultades y problemáticas diarias. Aborda el distanciamiento inevitable con la familia y los amigos de siempre; la constante incomprensión; la frialdad y el individualismo de la nueva ciudad; el estrés, la falta de adaptación e incluso el sentirse un extraño en su propia casa.
El Premio IBAFF Joven -votado por alumnos de Centros de Enseñanza Secundaria de la Región de Murcia- de esta edición fue para El arte de la cita, una historia cómica dirigida por la directora murciana Olivia Sanz que gira en torno cómo a veces es mejor reírnos de las cosas que nos duelen o nos provocan miedos e inseguridades.
En la sección del IBAFF Solidario, los votos de los espectadores de los diferentes colectivos participantes decidieron que la mención de Pantalla Solidaria fuera para el cortometraje Ancla, de Ángel Morales Ballesta. Un filme que narra cómo un veinteañeros afronta los primeros meses de su tratamiento hormonal en testosterona y, paralelamente, vive con su abuela octogenaria. El corto aborda la cotidianidad de una persona trans, cómo enfrenta los cambios que está viviendo, cómo se reconcilia con su pasado para poder vivir el presente y cómo sueña con el futuro.
En cuanto a los premios Arrebato de esta edición se entregaron dos, uno al periodista y escritor Carlos del Amor y otro al doctor en Patrimonio Cinematográfico Miguel García con una apuesta del IBAFF para este año de poner en valor el trabajo de estos dos murcianos que velan por la cultura y el cine.
En el caso de Carlos de Amor el festival destaca su dedicación para democratizar la cultura, por su sensibilidad y creatividad para enfocar las noticias culturales y su trayectoria apoyando todo tipo de manifestaciones artísticas con especial atención por lo audiovisual.
Y, en cuanto a Miguel García, premian una trayectoria de más de 45 años tratando, restaurando y manipulando películas analógicas asegurando que ese tipo de proyecciones puedan seguir disfrutándose. Además de haber sido siempre un apoyo al IBAFF en la gestión de sus proyecciones, facilitando el buen transcurso de festival desde sus inicios.
Además, durante la gala de clausura celebrada en la Filmoteca Regional, de nuevo con la sala A llena, el actor Ginés García Millán, Honorífico del IBAFF 2023, protagonizó el momento más emotivo de la noche recogiendo el galardón Honorífico que este año recayó en Javier Calvo y Javier Ambrossi 'Los Javis'. García Millán que comparte raíces de Puerto Lumbreras con Calvo, explicó a los presentes que tal y como a él le ocurrió el pasado año -que se encontraba sobre las tablas del teatro en Madrid coincidiendo con la gala-, la joven pareja de cineastas y productores no podía recoger su premio por encontrarse fuera.
El actor murciano resaltó lo muy agradecidos que están por esta distinción y su deseo de fijar pronto una cita para recoger el premio de manos de la organización y compartirlo con el público murciano en un evento abierto y festivo.
El IBAFF se premia a 'Los Javis' por su capacidad para revisitar clásicos e innovar en la estética cinematográfica, por arriesgar en los mensajes y las formas, por normalizar los discursos más tolerantes e inclusivos, arriesgando en lo artístico y democratizando un cine que se escapa de lo comercial y conquista a diferentes generaciones.