CARTAGENA (MP/EUROPA PRESS). Luz verde a las cuentas regionales. La Asamblea Regional ha aprobado los Presupuestos de este año 2022, que ascienden a 5.403 millones de euros. Los grupos que sustentan al Gobierno (el PP y los ex de Ciudadanos y Vox) han hecho valer su mayoría absoluta de facto para sacar adelante la considerada ley más importante del curso político. La oposición ha votado en contra (PSOE, Grupo Mixto y el único diputado de Vox). Por primera vez en la historia se ha empleado el voto telemático debido a la ausencia en el hemiciclo de cuatro diputados que han dado positivo en los últimos días.
El Presupuesto de 2022, a diferencia de 2021 y 2020, llega esta vez más pronto de lo esperado (aunque no hay ninguna obligación legal al respecto, la tradición y la cortesía imperan que las cuentas se deban aprobar antes del inicio del año). Se pone así fin a una tramitación parlamentaria que comenzó el 2 de diciembre con la aprobación de las cuentas por el Consejo de Gobierno.
El texto de este año contiene, como principales medidas, una partida total de 85 millones para la recuperación de Mar Menor, una de las grandes prioridades de la Región. Incluye además una nueva bajada de impuestos (300.000 murcianos se ahorrarán 72 millones en el IRPF) así como una subida salarial del 2% para los funcionarios de la Administración regional.
El consejero de Economía y Hacienda, Luis Alberto Marín, el hombre encargado de pilotar las cuentas, ha defendido en el pleno que la elaboración del Presupuesto ha sido "difícil", pues esgrime que la Región tiene una "financiación insuficiente", pero que aún así se ha logrado "blindar el Estado del Bienestar con el 80% de los recursos asegurando la Sanidad, la Educación y la Política Social". Marín confía en que el 2022 sea el año de la recuperación.
El debate ha estado marcado por las críticas por parte de los socialistas y de los diputados de Podemos al PP y a los diputados tránsfugas por la falta de consenso político. Los parlamentarios han lamentado que la aprobación de las cuentas sea para el Gobierno regional un "mero trámite" que "desatienda los servicios esenciales". Además, han recordado que de las 142 enmiendas presentadas por el PSOE y las 79 de Podemos "se han ignorado" casi en su totalidad.
El socialista Alfonso Martínez ha echado en cara al presidente Fernando López Miras que "no ha tenido nunca ni la más mínima intención de llegar a acuerdos con el PSOE". Durante la tramitación presupuestaria "no ha habido ni un gesto para buscar el acuerdo con el PSOE", adujo el parlamentario argumentando que en la Cámara tienen representación cinco partidos políticos.
El socialista ha expuesto que su grupo planteó 143 enmiendas para "mejorar la Atención Primaria, fortalecer la economía social, mejorar los barrios, pedanías y diputaciones, garantizar financiación de la economía social, de las universidades públicas y la gratuidad de los libros de texto y mejorar un mal Presupuesto". A su juicio, el Presupuesto de la Comunidad es para López Miras "un mero trámite y no una hoja de ruta para dignificar la vida de la gente". Y apostilló: Sólo les importa mantenerse en el poder a cualquier coste".
La portavoz del Grupo Mixto, la diputada de Podemos, María Marín, ha calificado como una "chapuza negacionista" los Presupuestos. A su parecer, el hecho de haber pasado "el rodillo" por las enmiendas presentadas por su grupo no hará desaparecer los problemas en Sanidad, Educación o en el Mar Menor. "Podrán ustedes pasar el rodillo, pero los problemas que abordan nuestras enmiendas y las personas afectadas no van a desaparecer. Toda esa gente que es víctima de sus políticas no va a desaparecer de un brochazo", recriminó.
También ha intervenido desde el Grupo Mixto el diputado de Ciudadanos Juan José Molina que considera una "vergüenza" los Presupuestos. En un tono muy crítico y duro, Molina ha retado al Gobierno regional a convocar elecciones y así restaurar la legitimidad de la Asamblea. Según Molina, los Presupuestos regionales "arrojan importantes carencias estructurales y que la deuda económica y moral que el gobierno del PP, tránsfugas y expulsados deja a los murcianos tardará décadas en recuperarse".
Por su parte, el portavoz del grupo parlamentario Ciudadanos, Francisco Álvarez, sostuvo que son los segundos Presupuestos que se preparan en siete meses y que permitirá aplicar la subida salarial prevista para los empleados públicos. "Se ha realizado un gran esfuerzo y no se ha recortado en servicios públicos garantizando la calidad", apuntó al tiempo que mencionó la falta del fondo covid y la infrafinanciación regional.
El portavoz del grupo parlamentario Vox, Juan José Liarte, empezó su intervención recordando la figura de Miguel Ángel Blanco ("asesinado por unos hijos de mala madre", cuyos socios "son los aliados del Gobierno") y reprochó la actitud del diputado Juan José Molina ("Compruebo con pena y sentimiento que el rencor, la frustración y el despecho han anidado su corazón. Espero que sea capaz de superar esos sentimientos pronto porque van a causarle problemas a su salud").
También planteó a la oposición que los Presupuestos "no van a resolver por sí solos los problemas de la Región". Es decir, "son la previsión financiera de un ejercicio y la proyección económica de políticas que enfrentan problemas de los ciudadanos de la Región". No obstante, expuso que las cuentas suponen un "gran esfuerzo para mantener y reforzar los servicios públicos de importancia" y ha pedido a los grupos parlamentarios centrarse en adoptar medidas que sean "favorables" para los ciudadanos. "Mientras no tengamos un sistema de financiación justo, tendremos que ejecutar unos presupuestos que no satisfagan a todos", agregó.
Cerró el turno de intervenciones el portavoz del PP, Joaquín Segado, que ha defendido el Presupuesto por ser "el más importante de la historia de la Región y servir para reactivar la economía". En su opinión, las cuentas son "rigurosas" y las previsiones de la Comunidad están "basadas en previsiones macroeconómicas y estimaciones serias". Y concluyó: "Son unas cuentas de buena gestión, unos Presupuestos reales, con bajadas de impuestos, medidas para la generación de empleo, conseguir la cohesión social y la recuperación económica".