CARTAGENA. La alcaldesa de Cartagena, Noelia Arroyo, ha recibido a la secretaria de Estado de Migraciones, Pilar Cancela, en el Palacio Consistorial donde discutieron la situación y el del Campamento de Inmigrantes ubicado en el antiguo Hospital Naval de Cartagena. Este encuentro, solicitado por el Ayuntamiento, contó con la presencia de la Delegada del Gobierno, Mariola Guevara, y otros representantes municipales, y se centró en la temporalidad y el impacto de esta instalación en la ciudad.
Cancela puso fecha de caducidad al campamento, primer semestre de 2025: "En este momento el Ministerio estamos al amparo de los de los fondos del PRTR, de los fondos de transformación y resiliencia del ámbito europeo estamos construyendo centros a lo largo del territorio español, ninguno por cierto en la región de Murcia, ninguno aquí. A medida que esos centros se vayan poniendo en marcha, que será posiblemente pues en el primer semestre, finales del primer semestre del año que viene, nos comprometemos a que las personas que están en el centro de Cartagena puedan ir derivándose a esos otros recursos. Por tanto creo que es una secuencia coherente y hay una hoja de ruta y hay un camino de compromiso político y de compromiso conjunto".
Noelia Arroyo expresó su gratitud hacia Pilar Cancela y Mariola Guevara, destacando la importancia de esta reunión para aclarar las dudas y preocupaciones de los cartageneros respecto al campamento de inmigrantes. Arroyo subrayó la solidaridad de Cartagena y su compromiso con la colaboración en la gestión de la crisis migratoria que afecta a España, particularmente en Canarias.
"Hemos mantenido esta reunión para conocer la situación del Centro Temporal de Atención a Inmigrantes y los planes del Gobierno de España respecto a esta instalación", afirmó Arroyo. La alcaldesa también destacó la importancia de representar la voz de los cartageneros, la Federación de Vecinos de Cartagena y Comarca, y los empresarios, quienes comparten la preocupación por la posible permanencia del campamento.
Una de las principales preocupaciones de Arroyo fue la posibilidad de que el campamento se convirtiera en un Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI) permanente. "Cartagena no quiere un CETI", enfatizó la alcaldesa, reiterando la solicitud de garantías de que la instalación será temporal, tal como se comprometió el Ministerio en octubre pasado.
Pilar Cancela aseguró que el centro nunca fue concebido como permanente y que su carácter temporal sigue siendo una prioridad. "El centro es para acogida y derivación, no para permanecer en el tiempo aquí en Cartagena", afirmó Cancela, comprometiéndose a que la instalación no se convertirá en un CETI y a que se trabajarán alternativas para reducir la estancia de los inmigrantes trasladados desde Canarias.
Arroyo solicitó tres garantías esenciales: una confirmación por escrito de la temporalidad del centro, la búsqueda de alternativas para reducir la permanencia de los inmigrantes, y la creación de un sistema de información permanente que permita la intervención de los servicios sociales municipales. Cancela accedió a estas peticiones, asegurando que el Ministerio no tiene intención de construir un CETI en Cartagena y que se trabajará en la derivación de inmigrantes a otros centros en construcción en España.
La secretaria de Estado también destacó la importancia de una comunicación fluida y constante entre el Gobierno central y el Ayuntamiento para garantizar la gestión eficaz y humanitaria del campamento. "Lo que nos hacía falta era precisamente esto, poder sentarnos en una mesa y anteponer el servicio del interés general, con una mirada pro derechos humanos", comentó Cancela.
También hablaron de la licencia de obras que a día de hoy está suspendida por el Ayuntamiento: "Lo que también hemos hablado es de la licencia que hemos solicitado en relación con las instalaciones del centro, no es una licencia para ampliar el centro, no son obras nuevas para dotarlo de más plazas, es una licencia que también afortunadamente estaba el Concejal de Urbanismo en la reunión y lo hemos clarificado, es para poder habilitar las construcciones que existen allí, que ya están, pero que hay que adecuarlas para derivar a esas personas que están en carpas, en lonas, que con el calor que vosotros lo sabéis mejor que yo, que hace aquí en Cartagena, puedan estar en los edificios donde haya unas condiciones de habitabilidad y de bueno pues de dignidad, vamos a decirlo así, pues más óptimas".
Arroyo solicitó tres garantías esenciales: una confirmación por escrito de la temporalidad del centro, la búsqueda de alternativas para reducir la permanencia de los inmigrantes, y la creación de un sistema de información permanente que permita la intervención de los servicios sociales municipales
La reunión también abordó las preocupaciones de seguridad y el impacto social del campamento en la comunidad local. Cancela desmintió que la presencia de inmigrantes incremente la inseguridad ciudadana, señalando que los centros cuentan con protocolos de seguridad adecuados y que cualquier incidente es gestionado con normalidad. "Las cifras nos dicen que no hay un incremento de inseguridad por la presencia de inmigrantes", afirmó la secretaria de Estado.
Además, se acordó colaborar estrechamente para que los servicios sociales del Ayuntamiento puedan ofrecer cobertura a las personas que abandonen el centro y se integren en la comunidad, reduciendo los posibles riesgos sociales.
La reunión concluyó con un compromiso renovado por parte del Gobierno central y el Ayuntamiento de Cartagena para gestionar el campamento de inmigrantes de manera eficiente y humana. Cancela y Arroyo acordaron mantener una comunicación permanente y transparente para garantizar que la instalación siga siendo temporal y que se tomen las medidas necesarias para reducir la permanencia de los inmigrantes en la ciudad.
Arroyo, aunque manifestó su desconfianza inicial debido a la falta de información previa, se mostró satisfecha con los compromisos alcanzados en la reunión. "Me quedo más tranquila después del encuentro. Esa tranquilidad y esa información es la que queremos compartir hoy también con todos los cartageneros", concluyó la alcaldesa.
El futuro del campamento de inmigrantes en el antiguo Hospital Naval de Cartagena sigue siendo un tema de gran interés y preocupación para la comunidad local. Sin embargo, la reunión entre la alcaldesa y la secretaria de Estado ha arrojado luz sobre los planes y compromisos del Gobierno, ofreciendo una mayor claridad y tranquilidad a los cartageneros.
El compromiso de no convertir el campamento en un CETI permanente, junto con las garantías de temporalidad y las medidas para mejorar la gestión y reducir la permanencia de los inmigrantes, son pasos importantes para abordar las inquietudes de la comunidad local y asegurar una gestión humanitaria y eficiente del campamento.
Mientras tanto, el Ayuntamiento de Cartagena seguirá vigilante y activo en la comunicación y colaboración con el Gobierno central para garantizar que los intereses y preocupaciones de los cartageneros sean atendidos y que la ciudad pueda continuar mostrando su solidaridad y compromiso en la gestión de la crisis migratoria.