MURCIA. El bailarín y coreógrafo cartagenero José Carlos Martínez sigue cosechando éxitos internacionales después de que comenzase el año como el primer español en coreografiar el ballet del Concierto de Año Nuevo de Viena. Ahora, el que fuera bailarín estrella de la Ópera de París y director durante ocho años de la Compañía Nacional de Danza, se lanza a la conquista de uno de los escenarios más emblemático de Europa, el Teatro de la Opera de Roma, también conocido como Teatro Costanzi, donde estrenará este domingo una coreográfica de El Corsario, que pondrá en escena el Ballet de la Ópera de Roma.
Este nuevo trabajo de José Carlos Martínez para El Corsario, el ballet en dos actos que se podrá ver en la capital italiana hasta el 8 de marzo, forma parte de una producción del Teatro de la Ópera de Roma, con libreto de Vernoy De Saint Georges y Joseph Mazilier basado en el poema de Byron. La dirección musical correrá a cargo de Alexei Baklan, bajo cuya batuta estará la Orquesta del Teatro de la Ópera de Roma.
"Ahora soy un coreógrafo freelance", manifestó a Murcia Plaza el artista cartagenero, quien adelantó que esta versión de El Corsario también viajará a Eslovenia para ser interpretado por el Ballet de Ljubljana. Igualmente, Martínez añadió que está preparando "mi versión de Giselle, una coreografía clásica que se va a estrenar con el Ballet de Zagreb de Croacia, el próximo mes de noviembre". Los planes de bailarín y coreógrafo son a largo plazo y también tiene "apuntada en su agenda" una colaboración con la Escuela de la Opera de París para volver a poner en escena en marzo de 2021 Scaramouche, "el ballet que hice para ellos".
"Mi agenda está bastante llena de coreografías, que es lo que tengo ganas de hacer. En un futuro no sé si volveré a dirigir una compañía, porque quiero estar más centrado en la parte artística y olvidarme un poco de la de gestión, que es lo que más tiempo me llevó en la Compañía Nacional. Ahora quiero centrarme en la creación, en experimentar para ver hasta donde puedo llegar como coreógrafo durante los dos próximos años", aseguró a Murcia Plaza este bailarín que en 1988 fue elegido por el mismísimo Rudolf Nureyev para ser miembro del Cuerpo de Baile de la Ópera de París, donde llegó a ser bailarín "estrella" y cuya carrera desde entonces está llena de logros como bailarín, director y coreógrafo.