Este organismo, que cesó su actividad por sus problemas de financiación y por la baja participación juvenil, vuelve a ponerse en marcha con una nueva directiva
MURCIA. El Consejo de la Juventud de la Región de Murcia resurge del olvido, siete años después, para volver a defender los derechos de los jóvenes murcianos. Este organismo, inactivo desde 2013 por sus problemas económicos, se reiniciaba el sábado 29 de febrero en una asamblea regional. La nueva directiva está compuesta por Miguel Lajarín (procedente de UGT) como presidente, y con Alba Ruiz (perteneciente a las Nuevas Generaciones del PP) y Celia González (de las Juventudes Socialistas) como vicepresidentas. Virginia Vizcaíno (Cruz Roja Juventud) se ocupará de la tesorería y Borja Moreno (FEMAE) se encargará de la secretaría.
La actividad del Consejo estuvo paralizada desde hace siete años, debido a la bajada de la participación de los jóvenes, como así explica Miguel Lajarín. Como consecuencia de este descenso, el organismo juvenil perdió su financiación. Ahora, el Consejo renace con la deuda que arrastraba en 2013, de unos 5.000 euros aproximadamente. La Dirección General de Juventud, con Raúl Puche como responsable, tiene que aprobar los presupuestos destinados para el organismo. Una vez que consigan saldar la deuda, podrán empezar a recibir ayudas por parte del Gobierno regional.
La asamblea puso de manifiesto los objetivos pendientes, muchos aún por determinar: la incorporación de organizaciones regionales de jóvenes en el Consejo; visitar los municipios murcianos y también las pedanías para que la participación de los jóvenes no se limite solo a la capital; promover el asociacionismo e impulsar la coordinación de consejos locales en los pueblos o crearlos en el caso de que no existan.
Los miembros del Consejo, menores de treinta años, vertebran este proyecto que se caracteriza por su diversidad: esta organización reúne a personas de diferentes estratos sociales y con distintas inclinaciones políticas y sociales, y de los que Lajarín defiende que es necesaria su implicación para la toma de decisiones.
Quieren llevar a cabo unas ‘Conferencias sectoriales’ para debatir temas concretos y donde todas las propuestas serán escuchadas y tratadas por todos los participantes. Con estas charlas, se busca evitar los enfrentamientos entre las distintas opiniones o ideologías diversas que se encuentran en el Consejo, democratizando todo lo posible para "garantizar un buen funcionamiento del organismo", comenta Lajarín.
La importancia de la participación de los jóvenes de toda la Región se encuentra en visibilizar sus problemas, así como sus derechos o necesidades. Tal y como afirma su presidente, es clave coordinar los consejos locales para facilitar también la realización de eventos o celebración de asambleas en las que cada vez más jóvenes puedan empaparse de este organismo.
La economía de los jóvenes es lo que más les intranquiliza hoy en día. Según el Consejo de la Juventud de España, el 81% de los jóvenes entre 16 y 30 años no puede permitirse abandonar el domicilio familiar. La precariedad de los contratos laborales, el paro juvenil, la burbuja de los alquileres o los contratos basura son algunas de las principales reivindicaciones.
Pero hay otras preocupaciones que van más allá de la economía. En materia social, los problemas de diversidad, igualdad de género, el medio ambiente, el suicidio juvenil -que es la principal causa de muerte no natural entre jóvenes-, o la ludopatía inquietan mucho también y desde el Consejo se ha reflejado su voluntad para intentar mitigar las inquietudes, injusticias y preocupaciones del futuro de la sociedad.
El Consejo espera que alrededor de una treintena de organizaciones colaboren con ellos como socias en el futuro. De hecho, cuando se hizo pública la vuelta de esta institución, varias entidades mostraron su voluntad de cooperar: Juventudes Comunistas, Juventudes Católicas, organizaciones de jóvenes de Lorca, San Javier, Mula… así como asociaciones como Fandif o Fundown, que mostraron su interés de unirse de cara a la próxima asamblea que se celebrará en mayo. Entre las entidades que quieren asociarse en el Consejo de la Juventud se encuentran organizaciones políticas, sindicales, ONG y también estudiantiles, como el Consejo de Estudiantes de la Universidad de Murcia.
Actualmente, ya son socias organizaciones como las juventudes del PP, PSOE y PCE, los jóvenes sindicalistas de UGT y numerosas organizaciones juveniles como el Movimiento Scout Católico, Cruz Roja Juventud, los estudiantes de Femae, las Juventudes Marianas Venecianas, la sección juvenil de FAMDIF/COCEMFE Murcia, entre otras.
Para darse a conocer entre los jóvenes, el Consejo confía en los propios asociados, aquellos que en primer lugar tuvieron una voluntad activa para la participación. Una parte de los componentes son asociados de Cruz Roja o de UGT, por lo que es el ‘boca a boca’ lo que también hará que muchos conozcan el Consejo. Además, desean realizar "actos atractivos para los jóvenes" y promocionarse por las redes sociales.
El pasado martes el Consejo acordó solicitar reunión con las principales autoridades de la Región, entre ellas, destaca Fernando López Miras, presidente de la Comunidad. Lajarín espera que este encuentro se celebre "pronto". La vuelta del Consejo de la Juventud ya es imparable: ha vuelto para quedarse.