La senadora Lourdes Retuerto y el delegado del Gobierno, José Vélez, en la sede del PSRM-PSOE, Princesa. Foto: EDU BOTELLA (EP)MURCIA. El socialismo regional elige este sábado a su nuevo líder. El PSRM-PSOE cerrará hoy, de facto, la era de Diego Conesa y se pondrá en manos de un secretario general que afrontará, como gran desafío, reeditar la victoria en las elecciones autonómicas de 2023. O lo que es lo mismo: el flamante timonel aspirará a desalojar al PP de la Comunidad Autónoma, la gran meta del PSOE murciano por la que lleva suspirando desde 1995.
Pepe Vélez o Lourdes Retuerto. Lourdes Retuerto o Pepe Vélez. El delegado del Gobierno en la Región o la senadora murciana por designación de la Asamblea Regional. Esa es la elección que tendrán que decidir los más de 5.400 militantes del PSRM, convocados este sábado a las urnas en las 62 agrupaciones del partido. Las puertas estarán abiertas desde las 10 de la mañana hasta las ocho de la tarde. Los afiliados más jóvenes podrán votar en los centros de las Juventudes Socialistas.
A las nueve de la noche, el secretario de Organización, Jordi Arce, anunciará los resultados. Lo hará desde la sede del partido, Princesa, ante la presencia de los dos candidatos y sus equipos. Si uno de los dos aspirantes logra el 50% de las papeletas (la mitad más uno) se proclamará automáticamente al secretario general electo del PSRM. Si no lo consiguen, habrá segunda vuelta, que se celebraría el próximo sábado, día 27. En cualquier caso, el ganador de las primarias no será proclamado definitivamente hasta el congreso regional, que tendrá lugar el 4 y 5 de diciembre.
Vélez es el favorito de las primarias. No sólo porque el exalcalde de Calasparra (fue regidor entre 2014 y 2020) ocupa un puesto de mucha visibilidad como es la Delegación del Gobierno y ha sido uno de los hombres de confianza de Conesa en los últimos años, con vínculo directo con Ferraz (de vocación sanchista, formó parte de la anterior ejecutiva federal), sino también porque ya exhibió una demostración de fuerzas al reunir 2.494 avales, muy cerca de la mitad del censo electoral. Sin embargo, serán los votos, y no los avales, quienes dicten sentencia. Retuerto confía en dar la campanada y alzarse con la victoria. No está todo dicho en estas primarias y la historia reciente ha dado muestras de la capacidad para la sorpresa que entraña la política. Verbigracia: ahí está el caso de Pedro Sánchez, defenestrado en su día por el aparato, hoy topoderoso líder del partido.
El delegado votará a primera hora en Calasparra (sobre las 10.30 horas prevé depositar su papeleta). Después tiene previsto descansar en su casa tras "una campaña muy intensa, y con las labores propias de Delegación". Por la tarde, bajará a Murcia y acudirá a Princesa a última hora, según apuntan fuentes de su candidatura. Aseguran que se siente con muchas ganas: "Ha recibido mucho cariño, no sólo con los más de 2.400 avales, también en las agrupaciones de toda la Región". Pero no quiere hablar de la palabra 'ganador': "Lo que veo es un PSRM con ganas de estar unidos y fuertes y con capacidad para vencer al PP y gobernar en 2023".
Retuerto votará sobre las 11 de la mañana en su agrupación de la calle Salitre de Cartagena. Allí pasará la mañana, rodeada de sus compañeros, hasta que, pasado el mediodía, se desplace hasta Murcia junto con su equipo para vivir el recuento de los votos. "Estoy nerviosa, pero también estoy muy ilusionada", reconocía la senadora a Murcia Plaza. "Ha sido una campaña muy bonita, hemos recorrido más de 40 agrupaciones y hemos hecho socialismo afectivo y efectivo, como nos gusta decir". Confía también en que la militancia la elija, aunque se queda "con el trabajo bien hecho" y subraya una reflexión final: que los militantes "voten en libertad" y, gane quien gane, "lo importante es que haya un proyecto ganador para 2023".
Ambos candidatos han mantenido una campaña limpia, sin sonados reproches entre ellos. Confrontaron sus ideas y sus proyectos en un debate celebrado en Princesa, cuyos afiliados pudieron seguir por streaming, y en el que hubo intercambio de golpes pero el tono, por lo general, fue educado y de guante blanco.
El vencedor tendrá la misión de reflotar al PSOE, estancado en las encuestas -el reciente Cemop le daba 14 diputados, tres menos de los que suma actualmente-. Sobre todo, el nuevo líder tendrá que relanzar una marca electoral que hace dos años acarició la gloria, al conseguir la victoria en las autonómicas, acabando con 26 años de victorias del PP, pero que finalmente quedó en aguja de borrajas tras los pactos poselectorales. Ser el secretario general, eso sí, no le convierte en el candidato a la Presidencia -esa será otra carrera-, pero sí le concederá plenos poderes para controlar todo el partido en la carrera hacia 2023.
El congreso de diciembre pondrá fin a la era de Conesa, cuyo futuro es hoy una incógnita. El alhameño, que ha sido el líder desde 2017, ha reiterado que está a disposición del partido. La nueva ejecutiva valorará si sigue al frente de la Portavocía parlamentaria en la Asamblea o, si por el contrario, le busca un nuevo cometido.
Conesa, que hace cuatro años se impuso en las primarias a María González Veracruz, cosechó los mejores resultados electorales en mucho tiempo pero quedó relegado a la bancada de la oposición. Dos años a la sombra del PP en el ámbito regional, aunque el PSOE logró hacerse con más de 20 Alcaldías en la Región, con ayuntamientos tan importantes como Lorca y Molina de Segura (a los que se uniría posteriormente Murcia).
En 2021 los socialistas ejecutaron su última gran maniobra para expulsar al PP de San Esteban, al aliarse con Ciudadanos para una moción de censura, pero la jugada no salió bien, marrada por el transfuguismo. Aquella operación contra López Miras fortaleció, paradójicamente, a los populares y debilitó a socialistas y naranjas.
Meses después, ya en septiembre, Conesa anunciaba que daba un paso al lado y renunciaba a la reelección. Aseveró que tomó su decisión tras pasar un último año "muy duro" personalmente, en los que tuvo que declarar como investigado -renunció voluntariamente al aforado- y sufrió ataques "furibundos, no solo políticos, también personales y familiares que superan cualquier línea roja".
Ahora el PSRM decide su nuevo rumbo, ya sin Conesa al frente. Vélez o Retuerto. Esa es la cuestión. La militancia tiene la palabra.
