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en estudio se encuentran el complicado traslado y su musealización 

Un proyecto valorado en 4 millones unirá al Tonina con el Peral en la Plaza de la Marina Española, para realzar el papel del arma submarina en Cartagena

23/12/2022 - 

CARTAGENA. Un proyecto valorado en 4 millones unirá en un mismo emplazamiento al submarino Tonina con el Isaac Peral en la Plaza de la Marina Española -junto al antiguo CIM-, para realzar el papel del submarino en Cartagena y convertir este espacio en un gran centro del arma submarina. Esta es la idea que desde hace unos meses se ha reactivado, después de que haya sido la Consejería de Turismo la que haya dado el primer paso con una concesión de 500.000 euros para avanzar en este propósito. Tras muchos vaivenes, cambios de criterio y de ubicación en los últimos años ahora, después de que sea la consejería dirigida por Marcos Ortuño la que se ha puesto en marcha con una inversión más que considerable, esta 'plaza de los submarinos' coge velocidad de crucero.

El proyecto de puesta en valor del Tonina consta de tres fases: musealización, traslado y obra civil. En el primer caso, el objetivo es que el Tonina sea visitable. Se abrirán dos puertas a proa y a popa, con su correspondiente climatización y ventilación.

Por otro lado y quizá el momento más complicado de todo este asunto, es el traslado. A día de hoy se plantean si hacerlo desde Navantia -donde está el sumergible- por mar a la Plaza de la Marina Española -la opción más costosa-, o por tierra desde el Arsenal, una vez que este fuera trasladado allí también desde Navantia por mar. 

Por último, está la obra civil, es decir, la consolidación que va a recibir el sumergible. Pesa 600 toneladas y la plaza necesitará una cimentación al firme para recibir al Tonina. 

El Tonina es un elemento de patrimonio industrial muy interesante. Se parece más, por su maquinaria, a todos los sumergibles de la Segunda Guerra Mundial que a los que se fabricaron posteriormente. De esta manera, se podrá tener uno frente a otro: el primer submarino de la historia frente a otro, de diseño francés, que era capaz de sumergirse a 60 grados a una gran velocidad.

La alcaldesa de Cartagena explicaba que el Gobierno municipal lleva meses trabajando en exponer el submarino en seco para garantizar su mantenimiento sobre la plaza del CIM, donde se expone el prototipo de Isaac Peral, con los que formaría un conjunto. 

El proyecto ha sido calificado de complejo y necesita de la participación de varias instituciones, para lo que se han mantenido reuniones con la Armada, impulsora del proyecto, Navantia, la Autoridad Portuaria y el Gobierno regional, en una doble dirección: avanzar en el diseño del proyecto de exposición y museográfico, además de estudiar cuál es la mejor ubicación y el mejor modelo expositivo, y decidir la alternativa que garantice la mejor conservación del submarino.

El Ayuntamiento, junto al resto de administraciones implicadas, está diseñando la fórmula de colaboración, un asunto en el que trabajan los servicios jurídicos y la Intervención municipal con jurídicos de otras administraciones. "Nuestro objetivo es que podamos establecer una fórmula de colaboración público privada que permita abordar un proyecto que es un enorme reto técnico y requerirá un importante desembolso económico", indicó la alcaldesa.

Las otras propuestas a la musealización  

Además, han sido varias las propuestas que han ido surgiendo a lo largo de estos últimos años para la musealización de la misma. Desde ubicarlo en la Cola de la Ballena sumergido, en parte, en el agua, un proyecto que ha resultado fallido finalmente, hasta la proposición de un estudiante de la UPCT para establecerlo donde antes estaba el Isaac Peral.

Hace dos años, el entonces Almirante Jefe de Apoyo Logístico, almirante Aniceto Rosique, indicaba que el proyecto "Cuesta unos millones de euros sacarlo de Navantia. Será un proyecto impresionante el ponerlo en un dique en seco", pero para eso se necesitará el apoyo de "Cámara de Comercio, Ayuntamiento, Comunidad Autónoma y Navantia. Cuesta un mucho dinero, ese es el problema, y por eso no está allí ya, pero espero que esté antes de que acabe esta legislatura, porque será impresionante para la ciudad", añadía el almirante, quien reclamó la ayuda empresarial en esta tarea.

Antes, fue la agrupación política municipal Movimiento Ciudadano quien exigía tomar una decisión al respecto y que se retomara el proyecto que en su momento propuso José López para convertir el submarino 'Tonina' (S-60) en un atractivo turístico y ampliar así la oferta cultural del municipio de Cartagena.  La propuesta surgía porque durante su como alcalde de la ciudad, el alumno de la Escuela Técnica Superior de Ingeniería Naval y Oceánica de la Universidad Politécnica de Cartagena (UPCT), Antonio Valle, presentaba el proyecto fin de carrera que elaboró para la musealización del submarino S-62 Tonina. 

Lo situaba a flote dentro del frente marítimo de Cartagena, concretamente en el jardín anexo a la Plaza de Héroes de Cavite, bajo la Muralla del Mar, donde anteriormente estuvo ubicado el submarino Isaac Peral. De esta manera se haría visitable, para que los cartageneros y visitantes pudieran ver el interior del submarino. Además, creaba un espacio para que pudiera ser utilizado como el Museo del Arma Submarina. El coste estimado del proyecto estimado era de 2 millones y medio de euros, una inversión que, a pesar de ser elevada, podría amortizarse en un plazo de ocho años y generaría unos beneficios netos de unos 400 mil euros para las arcas del ayuntamiento.

El tonina en navegación en 1986

De la clase Daphne y construido en la Empresa Nacional Bazán

El S-62 Tonina es un submarino diesel-eléctrico de la clase Daphne, conocida en España como clase Delfín que fue utilizado por la Armada española entre los años 1973 y 2005. Durante sus 32 años de servicio participó en diversas maniobras nacionales e internacionales, recorrió más de 200.000 millas navegadas, hizo más de 31.000 horas de inmersión. En él han estado destinados 16 comandantes, 93 oficiales, 1.222 suboficiales y 769 marineros. En el momento de su retiro era el submarino que más tiempo había prestado servicio en la historia del Arma Submarina Española, superando a su predecesor el Delfín (S-61).

Este submarino fue construido en Cartagena por la antigua Empresa Nacional Bazán y botado en 1972; causó alta en la Armada el 10 de julio de 1973 y la Cofradía Marraja le entregó la bandera de combate. Pertenece a la clase 'Delfín' y es gemelo del que lleva este nombre y que se encuentra actualmente expuesto como museo flotante en la ciudad alicantina de Torrevieja. Además del 'Delfín' (S-61) y el 'Tonina', otras dos unidades completan la serie: 'Marsopa' (S-63) y 'Narval' (S-64). El 'Delfín' y el 'Narval' fueron dados de baja en el año 2003.

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