CARTAGENA. La edil de MC, Arantxa Pérez, ha comunicado al Ayuntamiento de Cartagena su renuncia al acta de concejal de la Corporación debido a que "motivos profesionales hacen inviable la compatibilidad de la actividad pública y la privada", dice el partido cartagenerista en una nota de prensa.
Dicha renuncia se hará efectiva el próximo jueves en el transcurso del Pleno ordinario que se desarrollará en el Palacio Consistorial.
La concejal cartagenerista ha señalado esta mañana que "nuevas responsabilidades profesionales me impiden dedicar el tiempo que merece al proyecto de MC Cartagena".
"La defensa de los intereses de los cartageneros requiere de una disponibilidad de la que no disfruto en este momento", ha añadido Pérez.
De esta forma, ha continuado argumentando que "por ello, y porque entiendo la vida pública como un servicio a nuestra ciudad, a nuestros vecinos, y no como un modo de obtener un beneficio personal, doy un paso al lado en mis responsabilidades institucionales, al tiempo que reafirmo mi compromiso con el proyecto de MC Cartagena, que hoy es más necesario que nunca".
Las nuevas responsabilidades profesionales que asume en la empresa en la que desarrolla su actividad laboral no será óbice para que siga vigente su compromiso con Cartagena y MC, como ha manifestado. "Dentro de la familia de MC seguiré trabajando para devolver la institución a los cartageneros, y celebraré en 2023 la vuelta del cartagenerismo y la ejemplaridad a nuestro Ayuntamiento, junto a mis compañeros, y con José López como alcalde de Cartagena”.
El Grupo municipal MC Cartagena manifiesta su absoluto agradecimiento a Arantxa Pérez por su compromiso y trabajo en el proyecto de la defensa de la dignidad, el progreso y futuro de Cartagena y su Comarca, que representa la formación cartagenerista.
Su renuncia, ante la incompatibilidad de sus responsabilidades profesionales con la vida pública, "supone un ejemplo de dignidad personal" así como de respeto a la institución de la que ha formado parte y a todos los cartageneros, algo no tan habitual como debiera ser, ni en esta legislatura ni en anteriores.