MURCIA. Toda la oposición en bloque exige ir a las urnas en la Región de Murcia. Ante el escenario que se ha creado en la Comunidad murciana tras los últimos movimientos políticos, solamente el PP de López Miras y sus socios del Ejecutivo se oponen a una convocatoria electoral. En cambio, partidos tan opuestos como Vox y Podemos, además de PSOE y Ciudadanos, piden abiertamente la necesidad de elecciones anticipadas en la Región.
Vox fue el primero en pedirlo. Lo hizo tras registrarse la moción de censura en la Asamblea Regional y reiteró su petición una vez que se conoció la composición del Gobierno, formado por "consejeros expulsados y tránsfugas". Uno de los miembros del Ejecutivo es la exdiputada de Vox, Mábel Campuzano, designada recientemente como consejera de Educación. Su líder regional, José Ángel Antelo, daba este jueves un paso más y ofrecía a López Miras reformar la ley que impide al presidente repetir como candidato con la condición de que convoque elecciones de manera inmediata.
Ciudadanos, otrora compañero de Gobierno del PP, también se sumó a esta reclamación recientemente. Ana Martínez Vidal, su líder, solicitaba que se convoquen elecciones anticipadas "de forma inminente" para que los murcianos "puedan expresar su voluntad en las urnas" porque, adujo, "no es legítimo" un Gobierno "basado en tránsfugas" y por esa razón se debe dar la voz a los votantes.
El PSOE de Diego Conesa también se unió a esta petición tras conocer que el consejero de Empleo, Francisco Álvarez, renunciaba a su puesto para ocuparse de la Portavocía del grupo parlamentario de Ciudadanos. "López Miras, si quisiera, amara a la Región y a las instituciones que representa, ya habría convocado elecciones. Una desgracia para todos los liberales y conservadores de palabra y firma de la Región que respetan las instituciones", señalaba el líder regional de los socialistas.
Por último, este jueves, lo hacía Podemos. A su juicio, los murcianos "no pueden aguantar ya tanta degradación política y ética" porque, esgrime María Marín, el jefe del Ejecutivo "y sus tránsfugas siguen degradando las instituciones y la democracia de la Región, que ya cotiza a niveles de bono basura". La portavoz del Grupo Mixto en la Asamblea acusa al presidente de la Comunidad de ir "un paso más allá en sus traiciones, sus transfuguismos, sus corruptelas y sus pactos con la ultraderecha".
López Miras, si lo decidiera, se convertiría el primero en convocar elecciones anticipadas. Nunca en la historia de la Región se ha interrumpido una legislatura; los comicios siempre se han fijado de manera ordinaria en casi cuatro décadas de autonomía murciana.
El botón nuclear está en manos de Miras, de la misma manera que lo activó Isabel Díaz Ayuso en Madrid. El capítulo II del Reglamento de la Asamblea recoge en su artículo 24 que las elecciones serán convocadas "por el presidente de la Comunidad Autónoma en los términos previstos en la Ley que regule el Régimen Electoral General".
Miras siempre se ha negado a convocar comicios alegando "motivos de responsabilidad". Suele remarcar que el final de la legislatura "es en 2023" y así lo defendió también cuando se presentó la moción de censura: "Podría haber convocado elecciones, pero no era el momento, no es lo que la Región necesita. Sólo puede existir el objetivo de salvar vidas, de vencer a la pandemia y de superar la crisis económica, social y de empleo", afirmaba.
Además, hay que tener en cuenta otra variable. Si el presidente activara las urnas en 2021, en 2023 estaría obligado a volver a convocarlas. No en vano, la Región se encuadra en el régimen general de comunidades autónomas, por lo que, aunque hubiera comicios ahora, se tendrían que repetir en 2023. Es decir, "supondría someter a los ciudadanos a tres procesos electorales en cuatro años", como así apuntan desde el entorno del presidente.
Pero hay más razones. Con la ley en la mano, López Miras no puede repetir como cabeza de la lista. El Estatuto de la Ley del Presidente que en 2014 reformó Alberto Garre para evitar casos como los de Ramón Luis Valcárcel -que presidió la Comunidad desde 1995 hasta 2014- acotaba los mandatos a dos periodos. López Miras, que fue nombrado presidente en 2017 tras la dimisión de Pedro Antonio Sánchez y revalidó su cargo en 2019, acumula ya dos legislaturas al frente del Gobierno. No puede, por tanto, optar a un tercer mandato.