La derecha murciana carga contra Sánchez: el PP pide su dimisión y Vox su imputación

MURCIA. La derecha murciana carga en tromba contra el presidente del Gobierno español tras conocer la declaración del empresario Víctor de Aldama, uno de los presuntos cabecillas de la trama del 'Caso Koldo'. En su intervención ante el juez Ismael Moreno, Aldama, que tiene derecho a mentir, lanzó graves acusaciones contra el exministro de Transportes José Luis Ábalos, su antiguo asesor Koldo García y también contra varios dirigentes del PSOE. Y sobre el propio jefe del Ejecutivo central, Pedro Sánchez, llegó a afirmar: "Me dijo 'gracias' por lo que haces, me tienes informado'. Ante esto, el Gobierno ya ha anunciado una querella contra el propio Aldama y Sánchez ha tachado sus palabras de "menuda inventada" por ser "categóricamente falsas".

Bien distinta ha sido la reacción de PP y Vox, que son oposición en el ámbito nacional, y en la Región eran socios de Gobierno hasta julio. Ambos han criticado a los señalados por Aldama, pese a que no ha aportado pruebas (si bien el empresario asegura que está dispuesto a mostrarlas). Los populares de la Región consideran que Sánchez debe dimitir mientras que desde Vox pedirán la imputación del presidente y cuatro ministros. Los socialistas murcianos, en cambio, replican que las fuerzas conservadoras usan "bulos" y "especulaciones" para "intentar desgastar al PSOE".

Aldama apunta al presidente y este responde: "menuda inventada"

Aldama, sentado en la Audiencia Nacional, declaró que pagó mordidas a Ábalos, Koldo y otros dirigentes del PSOE. En concreto, dijo que entregó 250.000 euros al exministro de Transportes y 100.000 a Koldo García por las operaciones de compraventa de mascarillas en los peores días de la pandemia. También aseguró en sede judicial que dio dinero a otros cargos del PSOE, como el secretario de Organización, Santos Cerdán, a quien señaló que concedió 15.000 euros.

El empresario y expresidente del Zamora también apuntó directamente a Sánchez, de quien afirmó que le pidió conocerlo para agradecerle en persona por unas supuestas gestiones que Aldama había efectuado en México. Y manifestó que la fotografía que se hizo con él en un acto en 2019, revelada por el diario El Mundo, no fue fortuita: "Él quería conocerme". El propio mandatario respondió ante esto que era "categóricamente falso", calificando las palabras de "este personaje" de "menuda inventada". A lo que Aldama, ya en libertad, le retó: "Que no se preocupe que va a tener pruebas". El PSOE, por su parte, llevará a cabo acciones legales contra el empresario.

PP y Vox censuran; el PSOE no da credibilidad

Por un lado, Joaquín Segado, el portavoz parlamentario del PP, piensa que "Sánchez debe dimitir ya y no arrastrar a España a la inmundicia que él mismo ha provocado". Considera que la situación es "insostenible" y por eso entiende que "es momento de dar voz a los españoles para que se pronuncien en las urnas sobre si quieren más socialismo y más corrupción, o prefieren un cambio para España". En su opinión, "los españoles no se merecen soportar la agonía política y judicial de un presidente que no da las explicaciones pertinentes, huye del Congreso y hace uso y abuso de la mentira".

Por otro lado, el líder de Vox en la Región, José Ángel Antelo, que fue uno de los primeros en reaccionar, elevaba el tono y tachaba al PSOE de "organización criminal preparada para el delito" y avanzó que su partido solicitará la imputación del presidente del Gobierno y de varios de sus ministros. En concreto, Vox pedirá que se investigue a Sánchez y a los ministros Fernando Grande-Marlaska, María Jesús Montero, Teresa Ribera y Ángel Víctor Torres. Y pedirá la declaración como testigo de Santos Cerdán. "Quien aparece como número 1 de una trama criminal y corrupta no puede seguir al frente de ningún gobierno", añadió Antelo, convencido de que "antes o después acabará sentado ante el banquillo de los acusados".

El PSOE regional salía al paso de las críticas de la derecha: "Lecciones del PP, ninguna", contestaba la vicesecretaria general y portavoz del PSRM de la Región de Murcia, Carmina Fernández, quien opina que Aldama no tiene "ninguna credibilidad" porque "su único objetivo es intentar salvarse a sí mismo". Aduce que con sus palabras "pretende que le reduzcan la pena porque sabe que acabará en prisión" y le comparó con el "nuevo ‘pequeño Nicolás’". Apostilló que el PP, "por decencia", debería "respetar los procedimientos judiciales y la presunción de inocencia". Y concluía: "Cuando se demuestra un caso de corrupción, el PSOE siempre actúa con la máxima contundencia a todos los niveles".