MURCIA. Llevaba mucho tiempo dándole vueltas a la cabeza. La política es y será por siempre su gran pasión, pero conlleva un duro coste personal: el sacrificio de la familia, la renuncia de la carrera profesional, el desgaste de la salud. Mari Carmen Moreno (1976) ya no ocultaba que no quería seguir un mandato más al frente de la Alcaldía de Águilas, reconocía que acabaría el ciclo en 2027 y no se presentaría a las elecciones para pelear por una cuarta victoria. La misma persona que en 2015 se lanzó por el cambio en su municipio y renunció al coche oficial cuando llegó al Ayuntamiento se sentía también desencantada con el rumbo actual de la política, enfangada en la polarización y los ataques ad hominem. A finales de junio ‘se viralizaba’ una intervención en un pleno en la que Moreno expresaba su hartazgo por los escándalos protagonizados por miembros de su formación (“Me dan asco los puteros y los ladrones”) al mismo tiempo que reivindicaba que la mayoría de sus colegas no son como Ábalos. “La mayoría de los que nos dedicamos a la política somos”, decía, remarcando el 'somos', “honrados, tanto en mi partido como en el suyo”. Y añadía, desahogándose: “Nos estamos dejando media vida; yo me he dejado media vida en la política. Me estoy dejando parte de mi salud, he abandonado mi profesión, he abandonado a mi familia y a mis amigos en muchas ocasiones, algo que estoy pagando también, para que ahora cuatro sinvergüenzas nos hagan agachar la cabeza. Pero yo la cabeza no la voy a agachar”. Aquel día, con aquella declaración pronunciada desde las entrañas, delató que soportaba un quebranto interno durante mucho tiempo. Por todo eso y “después de una profunda y meditada reflexión”, rechazó esperar a 2027 y decidió adelantar a este verano, en pleno ecuador del mandato, su punto final de la política.

La voz se le quebró cuando, en el turno de los agradecimientos, mencionó a su familia, presentes en su despedida. “Ha llegado el momento de priorizar la familia y la salud”, recalcaba mientras recordaba a sus padres, sus hermanos, su suegra, su marido y sus dos hijos, "los grandes sufridores de todos estos años". A ellos, aseveraba emocionada, "gracias por vuestro apoyo, por vuestra comprensión, por vuestra paciencia; sobre todo os pido perdón por los malos momentos que por mi causa habéis sufrido, por mis ausencias, por soportarme en momentos complicados y no estar cuando me habéis necesitado". Al fin había llegado la hora de recuperar a su familia, su trabajo y su salud. "Pero esto lo he hecho también por vosotros", apostillaba. "Por dejar una sociedad más justa para vuestra generación".

Moreno cierra una etapa de 10 años al frente de Águilas y 24 años dedicados a la política en general. Se marcha una histórica del PSRM-PSOE, una de sus principales baronesas, que con su trayectoria se había convertido en el gran referente municipal del PSOE de la Región de Murcia. Tanto en los tiempos de bonanza del socialismo, cuando en 2015 borraban el predominante azul del mapa municipal, como en los tiempos del desierto, cuando la derecha volvía a adueñarse del poder local en 2023. Ella siempre mantuvo la llama socialista ardiendo. El PSOE, que hace diez años llegó a gestionar 26 consistorios, gobierna hoy en 13 localidades de la Comunidad, más una coalición en Mazarrón. Sólo una forma parte de las diez más pobladas de la Región: es Águilas. Este municipio del Mediterráneo, junto con otro también costero, aunque del Mar Menor, Los Alcázares, encabeza el frente socialista contra a la hegemonía de PP, que ostenta el bastón de mando en 30 de los 45 ayuntamientos.

La primera alcaldesa de Águilas

A sus 38 años, Moreno se convirtió en la primera mujer en alcanzar la Alcaldía de Águilas. Fue un triunfo histórico, pues los socialistas no gobernaban la localidad desde 1995. Acabó con 16 años de Gobiernos del PP, encabezó un primer mandato en coalición con Izquierda Unida y logró encadenar otras dos victorias, 2019 y 2023, ambas con mayoría absoluta. Pero consiguió trascender a las siglas, una cualidad muy común de los alcaldes que arrasan en sus feudos. Sirva como ejemplo el resultado de los comicios municipales y generales de 2023, separados por apenas dos meses de diferencia. El PSOE local obtuvo en el 28M unos 8.090 votos mientras que el PP ganó en el 23J con unas 6.785 papeletas. Moreno acaparó mas apoyos que Feijóo y Sánchez.

Fruto de esa legitimidad que dan las urnas, no dudó tampoco en manifestarse incluso contra su propio partido, aunque sin ser crítica ni desleal (“Pedro Sánchez merece toda mi admiración”, solía afirmar), cuando se sumó a las protestas en Madrid a favor del Trasvase, y eso que el agua del acueducto no llega a Águilas. “No estoy de acuerdo, como muchos socialistas murcianos”, opinaba en una entrevista con este diario sobre el Plan Hidrológico del Tajo aprobado en 2023 por el Ministerio, que condena a un recorte al Tajo-Segura. “Los socialistas murcianos lo hemos manifestado: no estamos de acuerdo con esas políticas de recorte al Trasvase a pesar de que haya otros recursos hídricos para la agricultura de la Región”, aducía entonces.

Pero Moreno se había ganado el respeto de todos sus compañeros. "ALCALDESA con mayúsculas”, le rendía tributo este martes su actual jefe de filas, Francisco Lucas. La regidora conoce bien las entrañas de Princesa, pues ejerció como secretaria de Organización en tiempos de Pedro Saura como líder. Durante doce años fue diputada en la Asamblea Regional, entre 2003 y 2015, hasta que dio el salto a la Alcaldía. Terminó sus dos primeros mandatos cumpliendo "el 90% de su programa". Pero no todo fue fácil. Recibió también una querella, que fue archivada. "Judicializar la política siempre está ahí. Quienes ocupamos cargos de responsabilidad tenemos esa espada de Damocles", se lamentaba.

Ahora ‘rompe’ su contrato con los aguileños, la expresión que ella misma acuñó cuando accedió a la Alcaldía, y parafraseando al periodista alguaceño Manuel Segura anuncia su adiós porque "las formas son muy importantes en la vida y saber marcharse es tan importante como saber llegar". A sus 48 años, regresará a su puesto de profesora de Biología y Geología y cederá el bastón de mano a uno de los ediles de su núcleo duro y que conoce bien desde su irrupción en la política municipal: Cristóbal Casado, actual teniente de alcalde, a cargo de Seguridad Ciudadana, Contratación, Deportes, Comercio, Carnaval, Festejos y Patrimonio. “Es un joven que nos ha sorprendido a muchos por su madurez, seriedad y profesionalidad", elogiaba Moreno en 2019, cuando le aupó al segundo puesto de la candidatura. El futuro alcalde, de 37 años, asume el reto de su vida, pero también el legado de Moreno.