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revalida la presidencia del pprm en el xviii congreso regional

López Miras renueva su liderazgo en el PP al abrigo de Feijóo pero no aplaca a Patricia

MURCIA. Al filo de las seis de la tarde, Fernando López Miras aparece por las inmediaciones del auditorio Víctor Villegas. Acompañado por Joaquín Segado, su mano derecha en la Asamblea Regional y organizador del cónclave que le reelegirá al frente del partido, el presidente camina tranquilo con una carpeta blanca bajo el brazo. Viste sin corbata y luce una sonrisa, ajeno a los principales titulares que disparan los medios de comunicación en el inicio del XVIII Congreso Regional del PP: "Manuel Durán anuncia que impugna el congreso", "Patricia Fernández no asiste al congreso". Nada parece perturbar al lorquino, que saluda a todos los presentes que se cruzan por su camino. No tiene dudas en el mensaje, los apoyos están amasados y hoy es su día grande. Tres horas después, la militancia del PP de la Región revalida el liderazgo de López Miras

El enigma sobre cómo López Miras despejaría la incorporación del sector crítico, encabezado por Patricia Fernández, se resolvió con un plantón y un cabreo. En concreto, la alcaldesa de Archena, que había firmado la paz con el lorquino a cambio de una integración, decidió no asistir al congreso mientras que Manuel Durán amenazó con impugnar el proceso. Al parecer, "la promesa de integración" no se ha cumplido, denunciaba el ex alto cargo de la Comunidad y también exconcejal de Murcia. Y al parecer, a Patricia no le resultó suficiente la propuesta de una Vocalía ni tampoco la Vicesecretaría que López Miras dejó vacante para ella. El rumor de Fernández y Durán planeó sobre el auditorio mientras el congreso avanzaba su hoja de ruta. Aunque, en realidad, el millar de compromisarios presentes estaba en otra onda: en los aplausos, en las muestras de unidad y en los abrazos con los afines, tan propios de estas citas. Todos mostraron su respaldo masivo a López Miras, evidenciando que la inmensa mayoría del partido está con él. También le secundaron Alberto Núñez Feijóo y Cuca Gamarra, el líder y la número dos del PP nacional. E igualmente lo hizo Ramón Luis Valcárcel, aunque a su manera, advirtiéndole de que en este partido sólo valen las mayorías absolutas. Lo dice quien logró cinco durante los 19 años que presidió la Comunidad Autónoma.

López Miras recogió el guante y prometió luchar para lograr un triunfo incontestable "y no tener que depender de nadie". Sería la primera victoria electoral de su carrera, pues en 2019 sufrió el golpe de una derrota, la primera para el PP desde 1995. Fue aquel el comienzo de la legislatura más tormentosa que se recuerda y en la que el presidente exhibió todo un ejercicio de supervivencia: la DANA, el empeoramiento de la salud del Mar Menor, la pandemia... y a la que se unió la moción de censura que casi le desaloja del Palacio de San Esteban. Dos de las personas que lo impidieron, Isabel Franco y Francisco Álvarez, acudieron al congreso, como invitados. Y Joaquín Segado, que hizo balance de una legislatura "extraña, peculiar, distinta y sobre todo difícil", mencionó el funesto episodio: "Cuando las ambiciones personales se ponen por delante, los ciudadanos lo pagan. La consecuencia de este infame juego fue que el PP salió más reforzado". El propio Miras, que lleva tiempo ignorando aquel capítulo, dejó una breve referencia a la moción de censura: tachó la maniobra de "legal, pero ilegítima".

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