José Ballesta y Fernando López Miras, en la campaña de 2019. Foto: EUROPA PRESSCARTAGENA. Si el presidente regional no adelanta la disolución de la Asamblea, en el mes de mayo de 2023 tendrán lugar las elecciones municipales y la regional. Antes de eso, probablemente en el próximo mes de junio, se celebrará el congreso regional del PP, que previsiblemente ratificará a Miras como candidato, ya sea porque no se presente ninguna alternativa, ya sea porque Patricia, la alcaldesa de Archena, no logre los apoyos suficientes para desplazarlo. El famoso novelista e historiador Thomas Carlyle solía emplear medias frases para sugerir la totalidad. Imitándolo, se podría decir que "cierto margen para la sorpresa siempre cabe, pero..."
Ya disponemos de algunos datos sobre las previsiones de escaños de los distintos partidos en la elección regional, así como también conocemos los resultados de las elecciones a compromisarios del reciente congreso nacional del PP. Con esos datos, cabe hacer algunas conjeturas fundadas (educated guess) sobre lo que nos espera.
"vamos camino de un gobierno de coalición entre el PP y Vox. EL CASO DE CASTILLA Y LEÓN DA ARMAS ELECTORALES al PSOE, Podemos y Cs... AUNQUE INEFICACES"
En opinión del Aparecido, dos son los resultados más llamativos de la última encuesta disponible del Cemop: ningún partido obtendrá mayoría absoluta en la Asamblea Regional y Ciudadanos no obtendrá ningún escaño. Esto último es explicable a la luz de la taxonomía publicada en el último Pasico: aunque sus dirigentes no parecen creerlo así, las preferencias de los antiguos votantes de Cs se parecían más a las de los del PP que a los de ningún otro partido político, incluyendo el PSOE. No es que fuesen idénticas, pero cabría imaginar que la segunda opción de los votantes de Cs era mayoritariamente el PP. En consecuencia, probablemente no se sintieron representados en la moción de censura que sus dirigentes presentaron contra el Gobierno de coalición con el PP del que formaban parte. Ahora la única incógnita a despejar es si los que constituyeron el Foro Liberal, negándose a apoyar la moción de censura, lograrán captar una buena parte del voto que antes iba para Cs. En buena medida, dependerá de su capacidad para divulgar su ideario liberal entre las gentes de la Región, asumiendo, además, que su opción solo será fructífera mediante alguna clase de acuerdo con el PP, si es que este partido lo acepta.
Del hecho de que ningún partido vaya a obtener mayoría absoluta se deduce que solo será viable un Gobierno en minoría con apoyo externo de otro partido o un gobierno de coalición. Vista la taxonomía política antes citada, los acuerdos más probables serían entre el PSOE y Podemos o entre el PP y Vox. En teoría podrían ponerse de acuerdo el PP y el PSOE para que gobernase la lista más votada, e incluso para formar una gran coalición, pero los precedentes no sugieren que eso vaya a materializarse: los socialistas se han negado a dejar que el PP gobernase en Castilla-León y expulsaron a Castejón por pactar con Noelia.
"Las disputas principales se centrarán en Lorca, Cartagena y Murcia, con resultados dispares"
Así pues, vamos camino de un gobierno de coalición entre el PP y Vox, como ya sucede en el caso castellano. Eso da un arma electoral al PSOE, a Podemos y a Cs, que suelen recalcar que ni en Francia ni en Alemania pactan los conservadores con el partido a su derecha. No obstante, ese argumento es ineficaz por tres motivos: primero, los votantes del PP y de Vox no penalizan que se pongan de acuerdo; segundo, el PSOE ha pactado con Podemos y, sobre todo, con los separatistas, un enlace altamente desaprobado por los votantes del PP y de Vox (y, cuando los tenían, por los de Cs); tercero, en Francia y en Alemania están prohibidos los partidos separatistas (en Alemania, también los comunistas), lo que hace que los mapas políticos no sean comparables. Esa afirmación queda más que probada con los resultados de la primera vuelta de las elecciones presidenciales francesas: mientras que Podemos y una parte del PSOE se alinean aquí con los separatistas, Mélenchon es una extrema izquierda nacionalista francesa (su partido se llama Francia Insumisa, pero a Podemos le da alergia la palabra España y Errejón prefirió Más País a Más España). De hecho, Mélenchon comparte con Le Pen la repulsa a la UE y un cerrado nacionalismo.
En suma, que la propaganda contra los pactos entre el PP y Vox surtirán poco efecto, a menos que este último partido arme un cirio al tratar de gobernar en Castilla-León.
Si las previsiones regionales parecen claras, coalición PP-Vox, distinto es el caso de las elecciones municipales. Un detalle, poco comentado, de las elecciones a compromisarios del PP es que los distritos electorales eran municipales, lo que dificulta discernir cuántos apoyos iban para los dirigentes regionales y cuántos para los locales. Además, como han reiterado tanto Feijóo como Ayuso, una cosa es ganar las elecciones orgánicas y otra es ganar las elecciones externas: un candidato puede barrer en su partido y fracasar ante los ciudadanos. Así, el triunfo interno en los compromisarios y el previsible triunfo del PP en las elecciones regionales no acarrearán, sin más, el triunfo en los principales municipios de nuestra región. Hay que examinar caso por caso. Procedamos.
Por un lado, parece asegurada la victoria municipal de los alcaldes que se han integrado en la dirección nacional del PP. Es casi seguro que Visi, Buendía, García y demás ganarán sus elecciones, como también lo logrará Patricia. En cambio, desplazar a la alcaldesa socialista de Águilas, la bella Moreno, no parece factible. Las disputas principales se centrarán en Lorca, Cartagena y Murcia, con resultados dispares, según el Aparecido.
"El alcalde socialista de Lorca, Mateos, está haciendo una buena labor"
El alcalde socialista de Lorca, Mateos, está haciendo una buena labor, anteponiendo los intereses de su ciudad a los de su partido cuando no coinciden, y estableciendo acuerdos con sectores locales, como Ceclor, normalmente reservados a los peperos. Para colmo, IU (o Podemos) tiene una cuota fija de 2 o 3 concejales, y Menduiña, la concejal de Vox con apellido playero, esté representando bien a sus votantes. Así, por más que se enorgullezcan de haber impedido que Jódar accediese al congreso nacional (extraña victoria, toda vez que ha sido el único pepero lorquino que logró ganar la Alcaldía), lo más probable es que Fulgencio no logre desplazar a Mateos. Hay gentes que votarán a Miras en las regionales y a Mateos en las municipales. A menos que Vox creciese desmesuradamente, en Lorca habrá gobierno socialista, en solitario o en coalición con IU, ya que el concejal de Cs sucumbirá electoralmente.
En Cartagena el lío es todavía mayor. El tripartito está funcionando bastante bien, pero no tiene garantizada su continuidad. Por un lado, Padín, que ha hecho un excelente trabajo, puede que no sea nominado por su partido o, si lo fuese, podría verse arrastrado por el declive general de Cs. Su única esperanza, si decide seguir, sería unirse a las huestes de Noelia o llegar a un acuerdo con Castejón. Por otra parte, Noelia mejorará un poco los resultados, pero probablemente no lo bastante para asegurarse la Alcaldía. Y todavía menos si persiste en su reciente tendencia a no escuchar ninguna opinión independiente. En tercer lugar, Castejón lo ha hecho muy bien, pero tendría que formar una asociación electoral con la que enfrentarse al PSOE. Según sus afines, podría obtener hasta seis concejales; según el Aparecido, serían tres, y eso contando con Padín. En suma, que el futuro del tripartito depende de Vox, partido en auge, pero sin ningún candidato a fecha de hoy. Se rumorea que podrían ofrecer el puesto a una persona muy vinculada a los empresarios, pero hasta el momento no hay nada decidido. O bien Vox pone un buen candidato y logra formar mayoría con el pecio del tripartito, o bien los de Movimiento Ciudadano se entenderán con el PSOE, volviendo López a la Alcaldía o entrando Giménez Gallo, asunto que ellos decidirán.
El PP solo lo tiene claro en Murcia, donde el tándem compuesto por Ballesta y Rebeca alcanzará, de sobra, la mayoría absoluta. No es que Serrano sea mala persona, ni mal candidato; es que Ballesta resulta invencible en su ciudad, máxime si cuenta con el apoyo de la tan eficaz como popular Rebeca. Es lo que hay.
JR Medina Precioso
