MURCIA. El perfil medio del alumno que más falta a clase, es decir, que engloba los niveles de absentismo escolar, es varón, inmigrante y con padres con un nivel educativo inferior a la secundaria. Lo señala la monografía "La importancia del absentismo escolar para el desarrollo y el desempeño educativos", editada por las fundaciones Ramón Areces y Europea Sociedad y Educación, y que destaca que se trata de un tema "cuya resolución permitiría una prevención y una acción por parte de la política educativa más eficientes, con beneficios tanto para los estudiantes como para la sociedad". Los problemas de salud de los estudiantes, los horarios de trabajo no convencionales de los padres, el bajo nivel socioeconómico, los cambios en la composición del hogar, la movilidad residencial y las responsabilidades familiares son algunas de las principales causas del absentismo escolar.
Además, también se aprecian mayores porcentajes de estudiantes ausentes entre quienes son repetidores, tienen bajas expectativas sobre su nivel educativo en el futuro, niveles de pertenencia a la escuela por debajo del promedio del país, de bienestar subjetivo por debajo del promedio del país y de acoso superior al promedio del país. "La mayor prevalencia de absentismo entre estudiantes tradicionalmente más desfavorecidos hace necesario mantener un enfoque de equidad a la hora de avanzar en la reducción de los problemas derivados de la falta de asistencia a la escuela, absentismo entre grupos y entre países", según el estudio. Y todo ello porque cuantos más días se ausenta un estudiante de la escuela peor es, por ejemplo, su desempeño en los tres dominios cognitivos de Matemáticas, Lectura y Ciencias.
Para evitarlo, los principales tipos de intervenciones educativas aplicados incluyen incentivos a la asistencia, reducción de barreras para acudir a clase, campañas informativas o ayudas para mejorar la adaptación a la escuela.
