La empresa que gestiona el cine no puede avanzar una fecha para su reapertura
MURCIA. Mientras el 91% de las salas de exhibición cinematográficas del país han reanudado su actividad, el futuro del cine Rex vuelve a estar en el aire. Aunque la intención de Neocine, empresa que gestiona la sala, era retomar las proyecciones de películas a partir de septiembre, la incertidumbre ante la nueva escalada de contagios y la escasa afluencia de público a las salas cinematográficas han suspendido por el momento los planes de reapertura.
La gerente de Neocine, Rocío Freixinos, ha indicado a Murcia Plaza que la reapertura se había planificado para septiembre u octubre, "pero la baja afluencia de público en general y la incierta evolución de la pandemia nos obligan a dejar en suspenso los planes de reapertura por el momento". Neocine también gestiona las salas de cine de Centrofama, centro comercial Myrtea y Thader en Murcia; Espacio Mediterráneo en Cartagena, Centro Comercial Dos Mares de San Javier y las de Vega Plaza de Molina de Segura.
En esta ocasión el cine Rex no está solo ante el peligro, le acompañan cientos de salas que ven cómo el cambio de hábitos que ha traído la crisis sanitaria y los nuevos modelos de consumo liderados por el streaming pueden abocarlas a la quiebra. Por este motivo desde Neocine matizan que la prioridad actual es salvar todas las salas de cine, aunque reconocen que el cine Rex es el más apreciado por el público que ya se movilizó hace dos años para evitar el cierre.
"Las salas de cine solo recuperan la mitad de los espectadores que tenían antes de la pandemia"
Pero los tiempos han cambiado y la lucha por la supervivencia ahora es general. La Federación de Salas de Cine (FECE) estimó las pérdidas del sector en 2020 en 446 millones de euros con un descenso de la facturación del 72%. Ante la debacle del sector, el Instituto de la Cinematografía y de las Artes Audiovisuales estableció el año pasado unas ayudas directas a las salas de exhibición de diez millones de euros. Desde FECE explican que esa partida estaba destinada a apoyar la apertura de los cines y la implantación del protocolo sanitario, pero no contemplaban unos cierres tan prolongados por lo que no fueron suficientes, teniendo en cuenta la negativa evolución de la pandemia.
En cuanto al cine Rex, el ser una única sala con un aforo de 574 plazas y en el centro de la ciudad, complica según Freixinos aún más la reapertura. "El público del centro es más mayor que la media y son los que más evitan las aglomeraciones ante un posible riesgo de contagio. Además, al disponer de una sola sala no podemos alcanzar a otros públicos con una segunda proyección", indica.
En la anterior crisis del Rex de 2019, el cine tuvo que cerrar durante dos meses. La movilización popular obtuvo respuesta por parte del Ayuntamiento de Murcia con un acuerdo que permitió reabrir la sala dando vida a la programación del cine mediante la proyección de obras audiovisuales de jóvenes creadores murcianos.
Con el inicio de la crisis sanitaria y el cierre de todas las salas de cine el acuerdo tuvo que ser cancelado y así permanece hoy en día. La actual corporación municipal, ante la delicada situación que vuelve a afectar al Rex, ha mostrado su disposición para buscar nuevas soluciones que permitan impulsar la cultura y garantizar el funcionamiento del inmueble como sala cinematográfica.
Si el cine no reabre, el edificio quedará protegido por el Plan Especial del Ayuntamiento de Murcia que preserva el exterior del inmueble y prohíbe que el terreno se destine a viviendas. Pero la normativa sí permite el cambio de actividad, una idea que la propiedad barajó hace dos años con la posibilidad de alquilar el inmueble para ubicar un gimnasio o un centro comercial.
Las puertas del cine Rex se abrieron en 1914 como Teatro Ortiz, denominación que se mantuvo durante 15 años hasta que en 1926 el auge del cine impulsó su cambio de teatro a sala de proyección bajo el nombre de Central Cinema, espacio donde comienzan a proyectarse las primeras películas sonoras a partir de 1931. La sala fue renovada en 1946, fecha en la que adopta el nombre de cine Rex que ha perdurado hasta nuestros días. La desaparición de los grandes cines de Murcia entre los años 70 y 80 dejó al Rex como único referente de las grandes salas de proyección de la ciudad.