PSOE y PP reviven el pulso por la plaza de la Región

MURCIA. Más de un millón de murcianos (1.061.835 exactamente) están llamados a la urnas por quinta vez en lo que llevamos de año. Los ciudadanos están convocados este domingo a una cita marcada por el bloqueo de los partidos políticos, que ha desembocado en la repetición electoral. La circunscripción de la Región de Murcia, por su población, aporta diez escaños al Congreso de los Diputados, además de cuatro senadores. Los electores murcianos pueden optar por quince candidaturas en las 3.370 urnas repartidas por 580 colegios electorales.

La Región vive también su particular batalla política, a rebufo de la contienda nacional. Socialistas y populares reeditan un pulso muy reñido, que se saldó a favor del PSOE por muy poco en las elecciones generales del 28-A y por mucho menos (casi 500 votos) en las autonómicas. La tendencia demoscópica invita a prever que el triunfo electoral del feudo murciano volverá a estar en manos de PSOE y PP. 

Por detrás se ubican Ciudadanos y Vox, que encaran el 10-N con sensaciones opuestas: el viento de las encuestas sopla a favor de Vox, vaticinándole una subida, y en contra de la formación naranja, pues los sondeos pronostican un descenso considerable. Unidas Podemos, por su parte, aspira a seguir manteniendo representación parlamentaria, mientras que Más País-Equo, la formación que encabeza en la Región el ex secretario general de Podemos, Óscar Urralburu, sueña con alcanzar un escaño.

Tradicionalmente los murcianos suelen votar en clave nacional en los comicios generales, sin mirar a la política regional. Pero esta vez el Mar Menor se ha colocado en la actualidad como un asunto de primer orden dada la gravedad de la catástrofe medioambiental. De hecho, miles de murcianos se manifestaron en defensa de la laguna, clamando soluciones. Otro factor que también pasa el examen de las urnas es la andadura del primer Gobierno de coalición de la historia de la Región, formado por PP y Ciudadanos.

El PSOE regional quiere repetir el histórico triunfo del 28-A. El socialismo murciano rompía en abril una sequía de 28 años sin ganar unos comicios en la Región y se convirtió en la primera fuerza con tres escaños. Pedro Saura vuelve a encabezar la comitiva, que apenas ha variado su lista. El partido confía en movilizar de nuevo al electorado de izquierdas y en atraer al votante desencantado con Ciudadanos por su alianza con el PP para formar gobierno. El objetivo es, al menos, superar los 200.000 votos en la Región para hacer frente al previsible ascenso del PP, que le pisa los talones.

El PP busca recuperar el feudo perdido. Tras 28 años ganando elecciones de forma incontestable, 2019 ha deparado dos sonoros fiascos para los populares. Una tercera derrota costaría mucho digerir en González Adalid. Y, tras quedarse con dos diputados en abril, el objetivo ahora es, como mínimo, alcanzar una representación parlamentaria de tres escaños. Teodoro García Egea, número dos de Génova y ‘director de orquesta’ de la campaña del PP en todo el país, lidera la papeleta de los populares murcianos. No puede permitirse otro fracaso electoral. El PP es, además, la candidatura que más ha variado, con las incorporaciones de Juan Luis Pedreño como número 3 al Congreso y de Juan María Vázquez y Francisco Bernabé como números 2 y 3 al Senado, respectivamente.

Ciudadanos combate contra las encuestas. No es una novedad para ellos concurrir con bajas perspectivas electorales, como así repiten desde el partido (“El votante de Ciudadanos se decide a última hora”), pero lo cierto es que Ciudadanos se juega mucho estos comicios. Las urnas examinan su política de pactos con los populares. El partido, que en abril consiguió su tope de votantes, busca repetir los dos escaños. Miguel Garaulet es el cabeza de lista mientras que se cae de la candidatura del Senado Pablo Ruiz Palacios (el director general de Emergencias destituido por ir a una obra en plena DANA). 

Vox pretende seguir en la cresta de la ola. El partido, que encuentra en la Región uno de sus mejores fortines, busca conservar los dos diputados que obtuvo el 28-A. Algunas encuestas, como la de GAD3 para el diario La Verdad, los colocan peleando por el triunfo. Pero la formación, cuya lista encabeza Lourdes Méndez, no quiere dejarse llevar tampoco por las altas expectativas. El 26-M ya supuso un bajón significativo de votos, al pasar de los 143.000 de abril a 62.000 sufragios en mayo.

Unidas Podemos pugna por mantener el escaño que viene cosechando desde 2015. En aquel momento, la formación vivía sus días de mayor éxito, con un fuerte apoyo de los murcianos, con más de 110.000 votos. Este respaldo ha descendido en los últimos años, hasta los 79.000 de abril. El partido, con Javier Sánchez Serna como número uno y en manos de una gestora desde septiembre, afronta su primera prueba de fuego tras la marcha de Urralburu a Más País. El PSOE será su gran rival en el espacio electoral progresista e Izquierda Unida vuelve a figurar dentro de las siglas de Unidas Podemos.

Más País-Equo es una de las novedades de los comicios. El partido de Ínigo Errejón también se presenta en la Región, con los ya exmorados Óscar Urralburu y María Giménez en los primeros puestos de la candidatura. Sus posibilidades de hacerse con un sitio en el Parlamento son muy escasas, pero el partido apela a la marca nacional y a la trayectoria de Urralburu como armas para lograr la hazaña.

Otras nueve candidaturas también concurren en los comicios: son el PACMA (Partido Animalista), Somos Región, Contigo Somos Democracia, Democracia Plural, Por Un Mundo Más Justo (PUM+J), Partido Comunista de los Pueblos de España (PCPE), Partido Comunista Obrero Español (PCOE) RecorteS Cero-Grupo Verde e Izquierda En Positivo.

El Pacma, que fue el partido extraparlamentario más votado en la Región, se presenta con Ignacio Daniel Carrasco como candidato, mientras que Somos Región, la formación que fundó y encabezó Alberto Garre, lo hace con Jesús Macanás. Garre anunció este verano su retirada de la política tras los malos resultados de su partido en los comicios.