MURCIA. Podemos e Izquierda Unida concurrirán juntas por primera vez a las elecciones autonómicas de la Región de Murcia el próximo 28 de mayo. Después de dos comicios en los que ambas se presentaron por separado, las dos fuerzas progresistas se dan la mano para ir aliadas en una misma papeleta. No irán solas, pues Alianza Verde también forma parte de la coalición.
Tal y como estipulaba el pacto, Podemos ocupará las dos primeras posiciones de la candidatura, si bien han acordado que el número dos sea rotatorio una vez transcurran dos años de legislatura. Así las cosas, el número tres, que es de Izquierda-Unida, pasará a ser en 2025 el número dos, siempre y cuando consigan los escaños.
La coalición aspira a conseguir un grupo propio en la Asamblea Regional. Sería un avance para las dos formaciones: para Izquierda Unida porque significaría regresar al Parlamento; para Podemos porque volvería a tener un grupo parlamentario propio, tras el paso por el Mixto, una bancada que ha vivido de todo esta legislatura (empezaron los dos morados en solitario y han acabado acompañados por seis compañeros más: dos parlamentarios de Ciudadanos y los cuatro del grupo Vox).
Con todo, el gran sueño de la coalición, más allá del grupo propio, es conseguir una suma aritmética en la Asamblea que permita desalojar al PP del Gobierno regional. En el fondo, la fórmula del Gobierno de España (PSOE y Unidas Podemos) sería el gran éxito que ansía la confluencia.
Podemos e IU tienen depositadas muchas esperanzas en esta cita electoral. El último barómetro del Cemop pronosticó tres escaños. Ambos se mueven en esa horquilla de dos o tres representantes, según la mayoría de sondeos conocidos en esta legislatura. No obstante, hubo una encuesta, de Simple Lógica (publicada por eldiario.es), que le otorga entre cuatro y cinco diputados.
Hay que recordar que Podemos vivió sus mejores años en 2015, cuando obtuvo seis representantes en la Asamblea. Izquierda Unida, por el contrario, desapareció aquel año de la Cámara. Desde entonces sus intentos por volver han resultado fallidos. En el último, en 2019, se quedaron en el 2,02%, a un punto del 3% exigido para el Parlamento. José Antonio Pujante (fallecido en 2019 a los 54 años) fue su último diputado.
María Marín, portavoz de Podemos, encabeza la papeleta. La cartagenera ha sido una de las diputadas más activas de esta legislatura, con una oposición permanente al Ejecutivo regional. El segundo puesto será ocupado, en los dos primeros años, por Víctor Egío, el secretario de Comunicación morado. El tercero será el líder regional de Izquierda Unida, José Luis Álvarez-Castellanos.
María José Durán, responsable morada de Memoria Democrática, será la cuarta mientras que la quinta será Carmen Sonia Martínez Sánchez, actual directora del SEPE y miembro de IU. El sexto será Fernando Miñana, de Podemos. Y en el séptimo aparece el primer integrante de Alianza Verde, Cándido Gabarrón. Cierra la lista, a modo simbólico, la histórica concejala de Murcia y excandidata de Izquierda Unida Esther Herguedas.