viaje fotografico a la primera mitad del siglo XX

La Murcia de los Mateo, desde casa: el AGRM comparte el libro de Vázquez Casillas sobre la saga de fotógrafos

7/10/2024 - 

MURCIA. Una buena noticia para los amantes de la fotografía o la historia, o ambas cosas. El Archivo General de la Región de Murcia (AGRM) ha subido a su plataforma (para su libre acceso libre) el libro Entre la tradición y la modernidad. La saga fotográfica de los Mateo. 1907-1946, un interesante proyecto de investigación realizado por el Laboratorio de Investigación Fotográfica de la Universidad de Murcia (LIFUM), bajo la dirección de José Fernando Vázquez Casillas. Fruto de este trabajo, se llevó a cabo una exposición en el AGRM en 2023 que mostraba cómo era aquella Murcia fotografiada por estos profesionales en la primera mitad del siglo XX, a través de retratos de estudio (tarjetas postales, escenas familiares, bodas, comuniones... hasta post mortem), fotografía documental y de prensa, así como de costumbre y tradiciones. Ahora, también es posible consultar desde casa tanto el texto como las imágenes incluidos en un documento con el que se puede viajar en el tiempo a través de un valioso patrimonio fotográfico que el AGRM y el LIFUM trabajan para salvaguardar.

Los Mateo fueron excepcionales fotógrafos de Murcia que documentaron la primera mitad del siglo XX y que dejaron un importante legado que permite hoy en día conocer mejor aquella ciudad que fue. La saga se inicia con Juan Mateo Fernández (1860-1916), que abre en 1907 en Murcia su primera galería fotográfica, concretamente en la calle Cartagena, número 27. En un primer periodo conforma su equipo de trabajo con su primogénito, Hermógenes Mateo López (1888-1918) al que se incorpora, hacia 1913, otro de sus hijos, Eliseo (1896-1957) y, posteriormente, Carlos (1902-1946). Como consecuencia de su evolución fotográfica y profesionalización amplían sus locales, primero en la calle Rambla 14. Tras la Guerra Civil, periodo en que el negocio estuvo cerrado, el estudio se traslada a la calle Alfaro, donde permanece hasta 1946, cuando fallece Carlos, último fotógrafo de la familia.

El estudio se distinguió, además de por los cuidados retratos de estudio, por su colaboración como corresponsales gráficos de diversos medios escritos y revistas ilustradas, tanto locales como nacionales (ABC, Blanco y Negro, Ahora, El Heraldo de Madrid, El Imparcial, La Hormiga de Oro, Mundo Gráfico). A Mateo Hermanos se deben reportajes emblemáticos que dieron a conocer Murcia y sus tradiciones en toda España como la coronación de la Virgen de la Fuensanta en 1927, pero también otros aspectos de la actualidad gráfica como actos políticos, sucesos, deportes o toros.

Con la exposición que se llevó a cabo hace un año en el AGRM se culminó la donación al Archivo Regional que realizó el profesor José Fernando Vázquez Casillas, responsable del (LIFUM), que ha ido adquiriendo y compilando imágenes de estos autores durante los últimos años. En total, la colección fotográfica del Estudio Mateo está compuesta por 240 fotografías en papel, así como de algunos documentos. Esta colección ha venido a completar las numerosas fotografías de los Mateo que se conservan en distintos fondos del Archivo, como las correspondientes a los Exploradores de Murcia o la Diputación Provincial.

Y es que figuras como Juan Mateo Fernández y sus hijos Hermógenes, Eliseo y Carlos Mateo López son imprescindibles para comprender la evolución de la fotografía, "pues vienen a ejemplificar la fusión entre la tradición y la modernidad en el oficio. Una dualidad que, sin duda alguna, se convierte en norma universal en todo el territorio español, produciéndose carreras elementales que alternan el 'estudio' con la 'calle'. Cada uno de estos ámbitos viene a construir su archivo fotográfico; un fondo con el que documentan, en su globalidad, lo ordinario y extraordinario de la cultura, la política y la sociedad de su tiempo. En definitiva, los Mateo nos retrataron, nos definieron, y perpetuaron la imagen de nosotros mismos, a través de su excelente trabajo de galería y de su claro ejercicio documentalista", se señala en este libro.

   

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