CARTAGENA. El Ayuntamiento de Cartagena, a través de la concejalía de Consumo, Hostelería y Comercio, ha emitido una circular informativa dirigida a los titulares de licencias de terraza para uso de hostelería, recordando la normativa vigente sobre la duración y renovación de estas licencias. Según el artículo 24 de la Ordenanza Municipal de Ocupación de la Vía Pública para Usos de Hostelería e Instalaciones de Temporada en Playas, las licencias no podrán ser otorgadas por tiempo indefinido, y su duración será de dos años o por el período que se fije anualmente.
La circular aclara que las licencias deberán renovarse por períodos iguales mediante el pago de la tasa correspondiente, siempre que no haya cambios en el sujeto pasivo, la superficie o el tiempo de ocupación, y que los elementos instalados se encuentren en buenas condiciones.
De acuerdo con esta normativa, los locales que cuentan con licencias que expiran el 30 de noviembre de 2024 deben presentar su solicitud de renovación entre el 1 y el 31 de octubre de 2024. Esta medida busca asegurar un control adecuado sobre las instalaciones en la vía pública y garantizar que los espacios destinados a la hostelería cumplan con los requisitos establecidos.
El Ayuntamiento recuerda así a los hosteleros la importancia de cumplir con estos plazos para evitar contratiempos en la continuidad de sus operaciones y contribuir a una mejor ordenación del espacio público en Cartagena.
Recordemos que hace tan solo una semana, Ayuntamiento de Cartagena junto con Hostecar, acordaron eliminar las terrazas covid. No obstante, se aprobaron de tres nuevas solicitudes, sumando un total de seis establecimientos que podrán mantener las terrazas covid, según informaron ambas instituciones en un comunicado. Los propietarios deberán cumplir con las indicaciones detalladas para llevar a cabo las obras necesarias que permitan la regularización de sus terrazas.
Para la aprobación se tuvo en cuenta los espacios disponibles y las condiciones de seguridad, además de factores como la compatibilidad con las ordenanzas municipales y la capacidad de los negocios para cumplir con los requisitos legales y de seguridad. También se priorizó el equilibrio entre la actividad económica de los establecimientos y el bienestar de los vecinos.