Frédéric Volkringer retrata los latidos de un barrio murciano lleno de vida: el 'Álbum de Familia' de El Carmen

MURCIA. El fotógrafo francés afincado en Murcia Frédéric Volkringer tiene una forma de mirar lo que le rodea que va más allá del instante que capta con su cámara. Lo que busca este artista es mostrar el espíritu que subyace tras las imágenes que retrata con naturalidad y sin artificios, ya sean las arquitecturas sorprendentes de La Manga, las silenciosas acequias de la Huerta o los habitantes de un barrio "tan multicultural y lleno de vida" como es El Carmen en Murcia. Este último trabajo es el que conforma la exposición Álbum de Familia, que se podrá visitar hasta el 28 de agosto en Los Molinos del Río.

Para este proyecto, seleccionado en el programa de los Reactivos Culturales del Ayuntamiento de Murcia, el fotógrafo francés recorrió los comercios y establecimientos tradicionales de El Carmen, justo antes de que la pandemia obligase a cerrar bares y restaurantes, recuerda. "Lo que he querido fotografiar es el espíritu del barrio a través de las personas que trabajan en él, que llenan de actividad el lugar, y conocen y charlan con sus clientes; ellos son, en definitiva, el corazón del barrio".

Así, a través de más de una treintena de retratos, el fotógrafo francés muestra quiénes están detrás de lo que se podría considerar una especie de "ecosistema" dentro de Murcia, donde "se puede encontrar de todo", apunta Volkringer, quien con sus fotografías ha puesto rostro a bares, restaurantes, panaderías, tiendas de ropa, ferreterías, talleres, floristerías... De una forma "natural", "sin floripondios ni artificios". Solo así se puede llevar a la práctica una frase de la fotógrafa estadounidense Berenice Abbott: "La fotografía ayuda a las personas a ver".

Desgraciadamente, algunos de estos comercios que abrieron sus puertas al artista francés no han resistido la pandemia, tal y como pudo comprobar el propio fotógrafo cuando recientemente visitó la zona para invitar a los protagonistas de sus fotografías a la exposición. Se encontró con algunas persianas echadas.

Frédéric Volkringer, quien lleva dos décadas residiendo en Murcia, se dedicó a la fotografía tras trabajar como colorista en una multinacional suiza relacionada con el mundo de la alta costura (para grandes creadores como Yves Saint Laurent, Courreges, Dior o Hermes). "Un trabajo interesante y estresante", recuerda ahora, desde la ciudad donde desde hace tres década combina trabajos artísticos y comerciales.