MURCIA. Scentium Flavours, el fabricante de aromas del Grupo Iberchem, venía experimentando hasta ahora un crecimiento orgánico que amenazaba con superar muy pronto las capacidades de producción de su actual sede en Alhama. Por tanto, y para adelantarse a un posible cuello de botella, la compañía ha decidido ampliar sus instalaciones para hacer frente a la creciente demanda.
Para ello, invertirá cinco millones de euros con el objetivo de construir una nueva planta de 3.000 metros cuadrados junto a su actual centro, de forma que podrá continuar con los trabajos diarios con total normalidad mientras se pone en marcha la ampliación. Una vez en funcionamiento, Scentium podrá incrementar su capacidad productiva en más de un 80% al tiempo que mejora su huella ambiental.
Al fin y al cabo, gracias a esta nueva planta, ampliará su laboratorios de control de calidad y creará nuevos puestos de oficina. En concreto, Scentium mejorará su producción de polvo y aromas líquidos, pues incorporará nueva maquinaria, incluida tecnología de última generación como el secado por atomización, lo que aumentará considerablemente su potencial. Aunque no hay aún una fecha exacta, la intención es que la inauguración se produzca a principios del 2024.
"Este proyecto representa un hito crucial en nuestro plan de expansión", celebra José Manuel Mateos, director general de Scentium Flavours: "En los últimos años, Scentium ha sido testigo de un crecimiento exponencial tanto en ventas como en volumen. Se volvió esencial ampliar nuestra planta de producción, ya que esperamos que esta tendencia continúe durante al menos los próximos cinco años".
Scentium es la división de sabores del Grupo Iberchem, que forma parte de Croda International. Con presencia comercial en más de 100 países, Scentium cuenta con más de 20 instalaciones ubicadas en Europa, Latinoamérica, África del Norte y Asia.
En los últimos dos años, Scentium ha sido testigo de un aumento significativo en la demanda de productos. También se expandió a nuevos mercados, lo que resultó en la incorporación de nuevos clientes a su cartera y el lanzamiento de nuevas categorías de sabores. Por lo tanto, "la expansión de la planta es necesaria para respaldar la creciente demanda de mercado ya que la empresa estaba llegando a su máximo en capacidad de producción", trasladan desde la compañía.
"Este nuevo centro fue diseñado teniendo en cuenta la preservación del medio ambiente y la seguridad de nuestros empleados", afirma Mar González, responsable de Operaciones de Scentium: "Usaremos el tejado del edificio para instalar un sistema fotovoltaico. A través de la innovación frugal, utilizaremos la gravedad para respaldar el flujo de producción y, por lo tanto, reducir nuestras emisiones de carbono. Finalmente, disminuiremos significativamente nuestro consumo de agua a través del rediseño de nuevas instalaciones de limpieza de tanques. También hemos añadido asistencia robótica para minimizar el esfuerzo de los empleados a la hora de mover bidones y paquetes, limitando los riesgos de lesiones laborales".
Scentium alcanzó en el 2021 -el último ejercicio del que hay registros- una facturación de 31 millones de euros, un 34% por encima de los 23 millones que obtuvo en el pasado 2020, lo que muestra la capacidad de crecimiento orgánico de esta filial de Iberchem. En cualquier caso, el auténtico potencial del negocio reside en su alta rentabilidad fruto del gran valor añadido de sus productos, pues ya en 2021 alcanzó un beneficio neto de 7,1 millones de euros frete a los 2,7 millones del año anterior.
Scentium forma parte del gigante alcantarillero de las fragancias Iberchem, que facturó en conjunto 250 millones de euros en el 2022 y apunta hasta los 400 millones en el horizonte del 2025, un objetivo para el que tendría que mantener un crecimiento anual del 20% en las ventas.