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MURCIA. Sabater Spices, la empresa murciana especializada en la producción de especias, sufrió el pasado febrero un incendio en su fábrica del Cabezo de Torres que afectó de gravedad a una de las plantas. Sin embargo, la firma supo recomponerse y ahora han aprovechado aquel incidente para incrementar su capacidad productiva.
Ya entonces tardaron menos de una semana en recuperar el funcionamiento tras el fuego, aunque fue necesario más tiempo para poder reconstruir la nave y alcanzar el estado actual, donde se está operando a casi el 100% de la capacidad. "Los bomberos y las autoridades hicieron un trabajo fantástico. La labor fue excelente", indica Ramón Sabater, director de operaciones de la firma, en conversaciones con Murcia Plaza.
Una parte de la nave afectada se empleaba para albergar la mercancía de producto terminado antes de trasladarse al almacén final, aunque también contaba con una línea dedicada al equipamiento, que ya ha vuelto a funcionar con normalidad. Sin embargo, aprovechando la reconstrucción, la empresa ha encontrado la forma de optimizar el espacio para incluir una segunda línea con la que poder incrementar la capacidad de producción en un 10%.
Los trabajos para la puesta en marcha de esta mejora se encuentran ya bastante avanzados, y el objetivo es que esta segunda línea pueda ponerse en marcha esta misma semana: "Los trabajadores de la compañía y el equipo directivo se han volcado por levantar la situación, y hemos logrado no solo ponernos en la situación previa sino incrementar la capacidad", destaca Sabater.
De esta forma, se ha logrado mantener un crecimiento en lo que va de 2024, manteniendo la tendencia de incrementar las ventas a doble dígito pese al incendio. Cabe recordar que el objetivo marcado por Portobello, el fondo de inversión propietario de Sabater, era alcanzar los 150 millones de facturación en el 2023 con un ebitda de 30 millones, lo que finalmente la empresa llegó a alcanzar.
Aunque la firma murciana continúa abriendo nuevos mercados, como el de la alimentación animal, la mayor parte de su crecimiento viene dado de manera orgánica por la mejoría de sus propios clientes, que demandan una mayor cantidad de producto.
En este sentido, conviene recordar que el sector de la especia se encuentra en un momento dulce, pues en el mercado se está dando una tendencia a buscar productos más naturales, que es lo que está exigiendo el cliente final. Por tanto, empresas que antes usaban aditivos se han pasado a la especia más tradicional.
"Para nuestros clientes es fundamental todo lo que tiene que ver con la sostenibilidad, porque la regulación cada vez es más estricta. También valoran nuestro potencial para la alta rotación y nuestra capacidad de cambio. Es lo que hace que nos den más negocio y nos ofrezcan nuevas oportunidades en distintos países", incide el director de operaciones de la compañía.
Por otro lado, Sabater Spices ya está planteando incrementar su presencia en la Región de Murcia. Para ello, está estudiando la posibilidad de poner en marcha una nueva fábrica en la Comunidad en los próximos años, aunque este proyecto aún se encuentra en una fase muy prematura y dependerá del crecimiento que experimente. No en vano, las nuevas instalaciones llegarán cuando las actuales dejen de ser suficientes para abarcar los pedidos, una situación que ahora se encuentra más lejana tras la implementación de la nueva línea.
"Nosotros estamos totalmente internacionalizados, y tenemos una fábrica propia en China. No obstante, la central se mantiene en Murcia porque ese es nuestro objetivo. Conquistar el mundo desde Murcia", concluye Ramón Sabater.
Sabater Spices se encuentra en un proceso de venta en estos momentos. Participada al 70% por Portobello Capital desde el año 2016, este fondo busca ahora capitalizar su inversión.
Tras varios meses de negociaciones y varios agentes de renombre interesados, parecía que el holding Japonés Marubeni era quien enfilaba el cierre de esta operación que estaría finalmente valorada en 270 millones de euros. No obstante, las negociaciones en exclusiva han quedado suspendidas debido a la mejora del ebitda de Sabater, que ha alcanzado los 30 millones, lo que ha motivado a Portobello a aumentar el valor de Sabater hasta los 300 millones, una cantidad que no está dispuesta a ofrecer la compañía nipona.
En consecuencia, aquella operación quedó cancelada, pero no por ello desistió Portobello en su intención de explorar los mercados en busca de un comprador interesado en la firma murciana. De hecho, en el informe recientemente publicado por Capital & Corporate se especifica que la salida de Sabater es uno de los movimientos pendientes del sector del capital riesgo, por lo que podría llegar a producirse en este mismo 2024.