Roberto Lifante: "Es el momento de que las empresas escuchen a las nuevas generaciones"

MURCIA. Bien vestido, sonriente y con el ajetreo propio de quien se sabe con mil tareas pendientes. Así ha atendido a Murcia Plaza el CEO de TK Analitycs y Tecnologyk 3D, Roberto Lifante. Natural de una pedanía de Abanilla, a sus 23 años ya ha conseguido hacerse su hueco en el panorama tecnológico de la Región, con múltiples proyectos en marcha y una facturación total de 2,5 millones de euros. 

Al hablar, deja patentes dos aspectos de su personalidad como empresario: la ambición con la que persigue sus objetivos y la devoción que siente hacia todos aquellos emprendedores digitales ya consolidados que consiguieron alcanzar el éxito gracias a la innovación. Así pues, Bill Gates, Steve Jobs o Elon Musk resultan unos protagonistas habituales en su discurso como símbolos permanentes de la meta a alcanzar.

-A tus 23 años ya tienes varios proyectos empresariales en marcha con un éxito notable. ¿Por qué esta prisa?

-Nunca es tarde para empezar. y tampoco pronto en algunos casos. Siempre he sido una persona autodidacta, que me ha gustado innovar, desarrollar cosas y estar entretenido. Además, nací con el don empresarial de querer meterme en líos. Es algo que yo llevo innato. Me gusta el ámbito tecnológico, y por eso quise ir compaginando los estudios de robótica con el sector empresarial. Más que nada porque este sector te permite trabajar sin una titulación si tienes los conocimientos y lo haces correctamente.

-Entiendo que la presión asociada tiene que ser alta.

-La carga de estrés que llevas es dura. No cualquiera vale para esto. Tienes que estar psicológicamente preparado para soportar errores y problemas, porque al final la función de un CEO es innovar y resolver problemas. 

-¿Cómo te preparas entonces para lidiar con esta presión?

-La clave está en saber desahogarte. Yo hablo con amigos y leo mucho sobre gestión empresarial, filosofía y como interpretar la vida.

"mi primer cliente fue con el que peor lo pasé, pero a la vez con el que más aprendí"

-¿Cómo has conseguido introducirte con esa agilidad en el círculo de los empresarios murcianos?

-Yo me introduje en los círculos de networking empresarial de Murcia. Me hice socio de las principales asociaciones, de Aje, de Croem y de Fremm. Empecé a ir a los eventos y me invitaron un día a visitar la Fremm. Yo lo que primero hago es dar, antes que pedir, entonces les propuse dar cursos de formación, webinar, charlas online, etc. Todo de manera filantrópica. Al final, el roce hace el cariño y la federación vio que respondíamos y que trabajamos correctamente. Todo esto fue yendo a más hasta que llegó al acuerdo de colaboración.

-¿Quién es la persona que más te ha enseñado?

-Yo empecé con 16 años en el mundo de los negocios y mi primer cliente fue con el que peor lo pasé, pero a la vez con el que más aprendí. Al final es un buen amigo y lo aprecio mucho porque, aunque al principio lo odiaba, ahora le doy las gracias porque no sería quién soy sin esa persona.

-Hace poco tuvo lugar el CEO Congress que organizaba Croem. ¿Compartes las ideas de transformación que allí se plantearon?

-Hay empresas que no se atreven a transformarse, a cambiar o a escuchar la voz de los jóvenes. Eso es un error. Yo siempre he escuchado la voz de los más sabios, por su experiencia, pero también hay que escuchar los puntos de vista de la nueva generación. Aquí el problema es que ya no es una cuestión de edad, sino que las generaciones distintas tenemos una forma diferente de ver la vida. Por eso es el momento de que las empresas escuchen a las nuevas generaciones.

-¿Crees entonces que la empresa está evolucionando hacia un cambio generacional?

-Yo diría que sí. Vino Elon Musk, que podríamos decir que es el referente de los emprendedores. Él vendió su empresa y se hizo un hueco entre los hombres más ricos del mundo gracias a sus ideas. Son cosas que el resto no han sabido ver.

"Las generaciones distintas tenemos una forma diferente de ver la vida"

-¿Qué consejos le darías a una persona que está emprendiendo?

-Que para recolectar hay que sembrar. Yo pienso que la gente tiene que ver esa bondad en las personas de que no voy a chuparles, sino que voy a aportarles. Es importante que vayas a dar antes que a recibir porque la vida te lo devuelve.

-¿En qué situación se encuentra el panorama tecnológico actual?

-La blockchain ha venido para quedarse. No es un futuro, sino que ya es un presente. Ocurre lo mismo con el internet de las cosas (IOT), el big data, la inteligencia artificial, etc. Son tecnologías a las que somos capaces de sacarles provecho gracias a la combinación entre ellas.

-¿Y hacia dónde se dirige?

-Steve Jobs dijo que el Iphone era una extensión de nuestro cuerpo. El futuro tiende al metaverso, a la virtualización y al estar todos conectados entre sí. Yo pienso que la gente cada vez va a socializar menos físicamente y va a apostar más por el mundo virtual. 

-Dices que te consideras una persona autodidacta. ¿Cómo te has preparado para llegar a dirigir dos compañías?

-Que no tenga una formación reglada no significa que no tenga estudios. Que se lo digan a Bill Gates o a Steve Jobs. Tú tienes una visión y una capacidad de hacer las cosas. Yo sí que me formo, estudio todos los días y estoy al tanto de las últimas noticias tecnológicas. Sé cuáles son los últimos avances, cómo funcionan y cuáles son más recomendables. No es cuestión de montar una empresa de la nada porque tienes dinero. No es así. Tienes que estar estudiando continuamente.

"Que no tenga una formación reglada no significa que no tenga estudios"

-En tu caso, ¿en qué ha fallado la formación reglada para que decidieras aprender por tu cuenta?

-No soy una persona a la que le guste mucho estar sentado delante de un libro estudiando. Leo mucho y me gusta, pero prefiero cosas concretas que me apasionen. La educación tradicional española no me gusta porque no enseña la vida real. Por tener matrícula en una carrera de gestión de empresas no significa que sepas dirigir una. A la educación española le falta todavía compaginar la educación con las empresas reales. De hecho, ahora los grados superiores son los que más salidas de trabajo tienen y las empresas buscan estos alumnos por encima de los universitarios porque están más formados en un sentido más práctico.