MURCIA. Lorquí ha sido testigo de un nuevo movimiento empresarial. Y es que dentro del auge del M&A -fusiones y adquisiciones- en la Región de Murcia, este municipio también está realizando sus propias operaciones, aunque a una escala más reducida, pues se ha completado la venta de Almami Maquinaria Industrial, especializada en la fabricación de este tipo de bienes.
La interesada en hacerse con este negocio ha sido la empresa también originaria de Lorquí CFT Auctions, dirigida por Maria del Carmen Guillén, que se ha postulado como la firma en llevarse este negocio que se encontraba buscando a un comprador para transferir la compañía.
Y es que Alfonso Marco, Miguel Rodríguez y Mariano Guerrero -los tres socios que vienen gestionando Almami en los cerca de 20 años de vida que tiene la empresa- estaban teniendo discrepancias en los últimos tiempos sobre el futuro del negocio, por lo que optaron por disolver su participación con la venta de la firma.
Por su parte, CFT Auctions se interesó en la empresa vecina por su capacidad para la fabricación de cualquier tipo de maquinaria nueva, un segmento del mercado que ellos en estos momentos no están abordando y que quieren comenzar a explorar. Al fin y al cabo, se dedican a la organización de subastas de activos industriales.
Según han confirmado fuentes de Almami a Murcia Plaza, la operación ya ha sido completada y la gestión de la compañía ha sido transferida, aunque se ha decidido mantener la marca comercial sin cambios. También la venta ha quedado reflejada en el Boletín Oficial del Registro Mercantil (BORME), pues CFT Auctions consta ahora como socio único y Maria del Carmen Guillén pasa a ser la administradora única en sustitución de los tres administradores mancomunados que gestionaban la empresa con sede en Lorquí hasta ahora.
CFT Auctions alcanzó en el 2021 -el último año del que hay registros- una facturación de 2 millones de euros, con un beneficio neto de 300.000 euros. Precisamente 300.000 euros fue la cifra de negocio de Almami en aquel año, aunque en su caso el resultado fue negativo con unas pérdidas de 100.000 euros.
