MURCIA. Pasan los años, mutan las circunstancias que azotan al mundo (Brexit, coronavirus, inflación y ahora la guerra comercial) y una realidad no cambia para desazón de la Región de Murcia: la infrafinanciación autonómica. El quebradero de cabeza se mantiene en el tiempo, sin solución a la vista. Un tema que volvió a salir a la palestra en la gran cita anual de los empresarios, la 47ª asamblea general de la Croem. "Estamos condenados", vino a decir, casi resignado, pero también reivindicativo, Miguel López Abad, el líder de la patronal. La falta de financiación fue uno de los asuntos que el empresario mencionó durante su discurso, en el que repasó las principales preocupaciones (según su visión empresarial) de la Región. También mencionó esta cuestión el presidente de la Comunidad, Fernando López Miras, encargado de la clausura. Durante su intervención, que se prolongó durante más de 35 minutos, recogió el guante de López Abad y lamentó que la Región lleva 11 años "en alegalidad" con un modelo "caducado y sin actualizar" porque, adujo, en 2014 "había una obligación legal de revisar el sistema que se creó en 2009".
¿Qué supone esto y qué consecuencias conlleva, en un lenguaje cuantitativo de números, propio de los empresarios? Según las cuentas del propio López Miras, si el pasado 2024 la Región de Murcia hubiera recibido "lo mismo que cualquier comunidad autónoma uniprovincial, Cantabria, La Rioja, Asturias, se habría cerrado el año con un superávit de entre 600 y 700 millones de euros", señaló el presidente. "Y si hubiéramos recibido lo mismo que la media de todas las autonomías, aunque el consejero [Luis Alberto Marín, titular de Economía y Hacienda] dice que 100 millones de euros, yo soy más conservador y digo que habríamos cerrado en equilibrio presupuestario, con cero déficit", expuso el mandatario.
"Ésa es la realidad”, añadía López Miras, lamentando que 11 años es mucho tiempo, pues, entre otras cosas, la población ha crecido en casi 200.000 habitantes. "Somos menos competitivos que el resto de comunidades porque se nos trata peor", se quejaba el mandatario regional, quien añadía: "Mientras esto no se cambie, piden esfuerzos injustos a los murcianos que no hacen el resto de territorios; y tenemos menos capacidad presupuestaria para dar herramientas y competir con el resto de empresarios del país". Y concluía: "La obligación del Gobierno de España es llevar el cambio de modelo al Consejo de Política Fiscal y al Congreso de los diputados y sentarnos a todos".
La Región es la peor financiada del país
No en vano, la Región ocupa por segundo año seguido el deshonroso puesto de ser la la comunidad peor financiada del país, tal y como reflejaba el informe de la la Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea). En concreto, Murcia obtuvo en 2022 -el último ejercicio con datos actualizados- una financiación por habitante ajustado de 3.056 euros, mientras que la comunidad mejor financiada, La Rioja, recibió 3.954 euros por habitante. Eso significa que cada uno de los habitantes de la Región recibió 309 euros menos que la media nacional y 898 euros menos que los ciudadanos de La Rioja para sanidad, educación y servicios sociales.
La realidad es que, lejos de un superávit, la Región de Murcia cerraba el ejercicio 2024 con una deuda de 13.518 millones de euros, equivalentes al 31,5% del PIB regional, según las cifras del Banco de España. De hecho, el pasivo de la Comunidad lleva aumentando de forma general desde el año 2008, a ritmo de récord por año. Hace 17 años las arcas regionales debían 755 millones; el pasado 2023 se cerró con 12.139 millones de euros, el dato más alto hasta entonces y equivalentes al 31,2% del PIB de la Región de Murcia. Ahora, la cuantía total se eleva hasta el punto de que si la deuda pública se tuviera que repartir por cada uno de los murcianos para liquidarla (el censo regional de 2024 es de 1.571.933 habitantes, incluidos los menores de edad, según el Instituto Nacional de Estadística), tocarían a 8.599,60 euros por persona.
El Gobierno regional defiende la tesis de, por más esfuerzos que lleve a cabo, el pasivo seguirá creciendo mientras no se reforme el sistema de financiación autónoma. Para la Comunidad, el gran culpable de la deuda es la infrafinanciación. "Diferentes estudios independientes han concluido que, entre un 60 y un 90% de la deuda regional se debe, de manera directa, a la infrafinanciación que padece la Región de Murcia", señalan al tiempo que subrayan que "un reciente estudio atribuye al sistema de financiación autonómica el 80% del incremento de la deuda regional de la última década".
No obstante, aunque la financiación es un agravio que perjudica -con datos objetivos- a la Región, no todas las voces autorizadas culpan a ella de los desmanes de la deuda. En 2020 el Colegio de Economistas de la Región exigía contundencia contra el déficit y defendía que no todo el pasivo se debía a la infrafinaciación, si bien reconocía que existe un déficit estructural causado por la escasa financiación. Del mismo modo, un informe del Centro Económico y Social (CES) calculaba que el perjuicio de la financiación representa apenas el 20% de la deuda regional.
