MURCIA. La dirección de Soltec ha tomado su decisión: la única fórmula para salvar la compañía molinense pasa por vender la empresa al fondo de inversión DVC Partners, que ha realizado una oferta vinculante para hacerse con el 80% de la propiedad por 30 millones de euros, a lo que habría que sumar otros 15 millones en liquidez y la aportación de avales para reactivar la actividad comercial.
Así lo ha defendido el CEO de la compañía, Mariano Berges, durante la Junta General de Accionistas que se ha celebrado este martes, donde se ha ratificado el nombramiento de los nuevos consejeros y se ha presentado la hoja de ruta para buscar la superviviencia de la compañía, que inició un proceso de preconcurso de acreedores antes la deuda que había acumulado con las entidades bancarias.
De hecho, parte del plan para garantizar la viabilidad pasa por alcanzar un acuerdo para poner en marcha un proceso de reestructuración de deuda con bancos, proveedores y acreedores que incluye una quita media del 50% y nuevos calendarios de pago diferidos. Por el momento, las negociaciones continúan en curso desde que se iniciaran el pasado mes de septiembre.
Como parte del nuevo enfoque, la compañía continuará con el proceso de desinversión en líneas no estratégicas como las divisiones de construcción (EPC) y gestión de activos, así como con la venta de participaciones en proyectos y sociedades. Estas acciones ya han contribuido a mejorar la liquidez y a reducir parte de la deuda.
De hecho, hace tan solo unas semanas se anunció que la empresa molinense había vendido su presencia en el desarrollo de 11 plantas solares en la Región por 18,6 millones para reducir la deuda con Darwin Gestión Global, sociedad íntegramente participada por Pino Investments.
Respecto a la cesión de la propiedad a DVC, cabe recordar que Soltec ya notificó a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) que esta operación supondrá una dilución del 80% para los accionistas actuales, pero "se considera esencial para asegurar la continuidad de la compañía".
Más allá de delicada situación financiera, la firma especializada en la fabricación de seguidores solares está poniendo en marcha más de 40 iniciativas internas enfocadas en la mejora de procesos, control financiero, gestión de tesorería y eficiencia operativa. Entre las medidas adoptadas destaca la separación entre la propiedad de la compañía y su gestión operativa, así como la incorporación de un equipo directivo especializado y consejeros independientes.
“Hemos diseñado una solución realista y con visión de futuro, que permitirá a Soltec recuperar su solidez. Con un equipo renovado y el apoyo de un nuevo socio estratégico, estamos preparados para afrontar los próximos retos y construir una compañía más fuerte", expuso durante su intervención el CEO de Soltec, Mariano Berges.
En consecuencia, la nueva hoja de ruta contempla medidas destinadas a consolidar la posición competitiva de la compañía en el segmento de los seguidores solares, su negocio principal, que en 2024 generó unos ingresos de aproximadamente 300 millones de euros y entregó 3,7 GW. Esta línea de actividad destaca por su alto nivel tecnológico, presencia internacional y márgenes sostenibles.
En cualquier caso, cabe recordar que Soltec registró unas pérdidas totales de 206 millones de euros en el 2024, con un resultado bruto de explotación (Ebitda) negativo de 28 millones de euros y un resultado neto de explotación (Ebit) negativo de 53 millones de euros. Por su parte, la facturación total se estableció en los 326 millones.
Además, la compañía ha anunciado una serie de despidos a través de un expediente de regulación de empleo (ERE) en su plantilla de Molina de Segura.