MURCIA (EFE).  La Confederación Regional de Organizaciones Empresariales de Murcia (CROEM) destaca el aumento sostenido del gasto en la Comunidad y el significativo desvío financiero registrado en 2024, lo que representa graves riesgos para el equilibrio económico regional.

El informe señala que el desvío del gasto en 2024 superó los 390 millones de euros, elevando el déficit regional a 475 millones, prácticamente el doble de lo estimado inicialmente.

Por su parte, los Presupuestos para este 2025 vienen condicionados por un irregular grado de ejecución de los Presupuestos del año anterior. Aunque los ingresos se ajustaron a lo previsto, se produjo un fuerte desvío del gasto, de 389 millones: frente a los 6.585 inicialmente presupuestados, el gasto finalmente realizado rondó los 6.975 millones. El impacto en el déficit fue directo, de 248 millones previstos, al desfase de 475 millones con el que se cerró el ejercicio.        

Los ingresos no financieros se situarán en 6.395 millones de euros, un aumento del 2,7 % respecto al año anterior, siendo el sistema de financiación autonómica la principal fuente de recursos con un peso del 77 %.

Destaca la fuerte subida recaudatoria que experimentará el Impuesto sobre transmisiones patrimoniales y actos jurídicos documentados (+14,8%, hasta los 344,7 millones), quizás asociados al reciente auge de los sectores con los que está más vinculado, como Construcción.

Sin embargo, el techo de gasto no financiero crece por debajo del PIB nominal estimado (+4,8 %), lo que refleja una reducción proporcional del peso del sector público en la economía murciana.

Por políticas de gasto, Sanidad y Educación absorben más de cinco euros y medio, de cada diez de los presupuestos. 

El déficit previsto para 2025 se cifra en 312,8 millones de euros, pero tras los ajustes contables del Ministerio de Hacienda, podría reducirse a -15,7 millones. Esto mantendría a la Región dentro de los objetivos de estabilidad financiera. No obstante, CROEM alerta que el elevado nivel de gasto ejecutado en 2024 podría comprometer seriamente estas estimaciones y dificultar el cumplimiento de los objetivos.

Para 2025, la Comunidad proyecta un crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) del 2,5 %, en línea con las previsiones de la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF), que estima un 2,4 %.

La recaudación por transmisiones patrimoniales destaca por un crecimiento del 14,8 %, impulsado por el dinamismo del sector de la construcción. Este incremento contribuye a la mejora de los ingresos fiscales, aunque la dependencia del sector plantea interrogantes sobre la sostenibilidad a largo plazo.

Las inversiones públicas se centran en infraestructuras y transporte, con una partida de 631 millones de euros destinada a operaciones de capital. Estos proyectos buscan fortalecer la conectividad y dinamizar la actividad económica.

La patronal murciana concluye que, aunque las previsiones de ingresos son razonables y prudentes, el desafío principal radica en el control del gasto. La necesidad de evitar desequilibrios financieros en un contexto de fuerte endeudamiento será crucial para garantizar la estabilidad económica de la Región de Murcia en los próximos años.