MURCIA. Menos dinero invertido, y aún menos obras a las que dirigir el capital. Este es el balance del sector de la construcción en la Región durante el 2024, que volvió a contraerse como consecuencia de la caída de las licitaciones públicas, según los datos del estudio "Análisis y evolución del sector de la construcción", realizado por la firma tecnológica de soluciones analíticas DoubleTrade.

Fueron 1.340 las obras completadas en el sector durante el 2024, lo que equivale a un batacazo respecto a las 1.508 que se finalizaron en el año anterior, pues supone una caída del 11,2%. De hecho, el descenso resulta tan pronunciado que sobrepasa los niveles del 2022, cuando se ejecutaron 1.445 trabajos en total.

La inversión también quedó especialmente tocada, pues se perdieron 100 millones de gasto durante el pasado año. No en vano, el sector movilizó 1.704 millones de euros en 2024, un 5,6% menos de lo que consiguió en el 2023. Asimismo, también queda por debajo de los 1.755 millones del 2022.

No obstante, cabe resaltar que esta contracción viene motivada por la obra pública, pues la inversión cayó un 16,8% en el 2024. De esta forma, el gasto en licitaciones quedó establecido en los 715 millones invertidos frente a los 850 millones del año anterior, lo que explica el descenso en las cifras.

De cualquier forma, conviene recordar que esta caída en la actividad rompe con la tendencia que viene siguiendo el resto de España, pues en el conjunto de la nación las obras crecieron un 9% y el presupuesto llegó a disparase hasta un 27%, con 92.000 millones de euros en total.

"Tenemos que tener cuidado con los dientes de sierra y reivindicar lo mismo que en otras zonas de España, donde sí sube el gasto. Lo que no podemos hacer es estar por debajo y teniendo menos de lo que merecemos. El ciudadano paga más y recibe menos", subrayó José Hernández, presidente de Frecom, durante la reciente presentación del Barómetro elaborado por la patronal de la construcción.

El líder de los constructores de la Región, remarcó que la construcción de obra nueva está reactivándose en las zonas principales de las ciudades, pero que el ciudadano deberá buscar un mayor ajuste de precio a la hora de adquirir una casa.

Así pues, apunta a que "el deseo sería alcanzar las 4.000 viviendas" durante este 2025, lo que mejoraría notablemente las 3.295 con las que se cerró el 2024. En cualquier caso, señala que esta cifra aún queda "a la mitad de las que hacen falta", pues la proyección de hogares en la Comunidad es de unos 8.000 al año.

"Va a continuar subiendo el precio porque hay una alta demanda, pero los intereses están bajando y la inversión extranjera sigue favoreciendo los proyectos en marcha. Al mismo tiempo, seguiremos reivindicando que necesitamos más suelo y pagar menos impuestos para que podamos tener una vivienda asequible para ofrecer a nuestros ciudadanos", relató Hernández.

Más allá de la falta de dinamismo, el sector también afronta otro problema destacado, como es el envejecimiento de sus plantillas y la falta de mano de obra como consecuencia de la ausencia de relevo generacional. En consecuencia, la cantidad de trabajadores por encima de los 55 años se ha duplicado mientras que los menores de 25 se ha reducido a la mitad. Tanto es así que más del 50% de los empleados en activo en estos momentos superan los 45 años.