MURCIA. La Comunidad sigue invirtiendo en la movilidad eléctrica con la compra de otros ocho vehículos para reforzar la flota de transporte público. En concreto, ha completado la compra de ocho autobuses a la compañía de origen chino Alfabus, que se unirán a los 28 que ya adquirió a la vasca Irizar e-mobility.
En concreto, ha destinado cinco millones de euros, impuesto incluidos, a esta operación, lo que supone una reducción de un millón de euros respecto al presupuesto inicial, que está financiado por los fondos europeos. De hecho, el precio era el factor más valorado, con un 43% de la nota final, aunque Alfabus también ha obtenido la máxima clasificación en los criterios técnicos, lo que la ha colocado con 95 puntos sobre los 100 posibles.
De esta forma, ha logrado imponerse a las otras tres competidoras, de las que dos de ellas eran otras dos compañías de origen chino y la tercera se trataba de una empresa nacional. En concreto, la adjudicación ha recaído sobre Alfabus Europa SRL, la filial con sede en Italia mediante la que esta firma opera en el continente.
De acuerdo con los pliegos, esta empresa contaba con un plazo de 10 meses para entregar los vehículos desde la fecha de formalización del contrato, lo que tuvo lugar el pasado 30 de mayo. Sin embargo, se ha comprometido a recortar este plazo en cuatro meses, de manera que los autobuses tendrán que estar en manos de la Comunidad antes de que acabe el mes de noviembre.
Estos ocho autobuses de Clase II tienen que tener un mínimo de 75 plazas y estar configurados para cargar con manguera tipo CCS Combo II. Además, dispondrán como única fuente de energía la electricidad almacenada en sus baterías, que deberá ser la suficiente para la prestación diaria del servicio asignado al vehículo "sin posibilidad de efectuar cargas parciales de oportunidad durante el mismo".
De hecho, se especifica que no emplearán ningún tipo de combustible fósil para el funcionamiento de ninguno de los sistemas del vehículo, incluido el sistema de climatización. Asimismo, todos contarán con rampa para personas con movilidad reducida.
Para preparse para el impulso a la movilidad eléctrica, la Consejería de Fomento adjudicó hace unas semans la redacción de proyecto y obra para la instalación de 23 puntos de recarga de autobuses eléctricos en La Asomada (Cartagena) y en Molina de Segura por un valor de 1.866.793 euros.
En total, la Consejería va a contratar un total de 54 puntos de recarga para esta nueva flota, por valor de más de 5,1 millones de euros, que se situarán en Alcantarilla, Cartagena, Molina de Segura y Santomera.