MURCIA. Irregular y con demasiadas dudas pero ganando para llegar a los cuartos de final en el Masters 1.000 de Roma. Carlos Alcaraz Garfia se impuso al ruso Karen Khachanov por 6-3, 3-6 y 7-5 en 2 horas y 27 minutos de un partido de octavos de final más intenso que bueno y en el que el murciano cumplió pese a estar lejos de su mejor versión. Lo esencial es que venció y ya este miércoles en torno a las tres de la tarde se enfrentará al británico Jack Draper, el número 5 del mundo.
Era el quinto duelo entre el actual número 3 del mundo a sus 22 años y el gigante de Moscú, de 1,98 metros de estatura, que a sus 28 años es el 24 de la ATP -llegó a ser el 8 en julio de 2019- y en los cuatro anteriores se los había llevado el que también ganó éste y lo había hecho sin ceder ni un solo set.
Esta nueva entrega, la tercera para CA en la ciudad eterna tras las saldadas a favor ante los serbios Dusan Lajovic y Laslo Djere, comenzó mal para Alcaraz pues cedió el saque nada más arrancar y luego Khachanov logró el 0-2 apoyándose en dos aces seguidos.
Mostrándose muy errático -siete fallos no forzados en el arranque-, el español se vio con desventaja también en el tercer juego aunque reaccionó a tiempo y salvó esa situación que amenaza con el 0-3. Ya habiendo empezado a sumar el pupilo de Juan Carlos Ferrero y Samuel López tenía la posibilidad de apretar a un rival que estaba crecido y lo demostró logrando su tercer juego en el partido en blanco.
En el ADN de Alcaraz está lo de pelear por mucho que no se encuentre tan a gusto en la pista y quedó de manifiesto. Logró el break que le hacía falta y así llegó al 3-3. Eso reforzó su confianza y el palmareño creció enormemente para tomar la iniciativa por primera vez en el encuentro y, además, con puntos de esos que demostraban que iba a más.
El envite había dado un gran vuelco y el cuarto juego consecutivo de Carlos, segundo al resto, le colocó a punto de llevarse la primera manga. La cerró con el quinto y rematando con un muy buen derechazo después de 39 minutos y una reacción de las que dejan tocado al rival.
En la segunda manga cada tenista fue sacando adelante su servicio y se sucedieron las igualadas (1-1 y 2-2). Daba la sensación de que el favorito estaba madurando el encuentro en esa fase del choque a la espera de su oportunidad para asestar el golpe casi definitivo. Un nuevo quiebre le dio el 3-2 haciendo buena la primera posibilidad de ruptura que hubo en este parcial.
Sin embargo, a partir de ese momento se enredó echando la bola al aire y Karen Khachanov lo aprovechó para volver a igualar esta manga. Ese instante de desconexión cambió la inercia de lo que sucedía sobre la pista central del Foro Itálico y el ruso retomó aire y elevó el nivel de su tenis para voltear el resultado con el 3-4.
CA aún estaba a tiempo en enmendarlo pero continuó complicándose frente a un adversario que pasó de estar en la lona a creérselo y, de hecho, logró otra ruptura que le hacía estar cerca de llevar el encuentro al tercer set. Es lo que hizo frente a un Alcaraz al que se le fue la inspiración y, tras otros 46 minutos, el pase a los cuartos se decidiría en la tercera manga.
KK, quien por fin le ganaba un set a Carlos después de haber perdido diez contra él y lo hacía enlazando cuatro juegos seguidos, siguió convirtiéndose en una seria amenaza pero el de El Palmar resurgió. Cortó la mala racha con el saque y luego dispuso de un 30-40 que no terminó de materializar, por lo que el marcador fue de 1-1. Eligiendo mal el español no dejó de estar en problemas y se vio con desventaja por dos veces en su siguiente turno de servicio. Lo arregló con calidad y aplomo para el 2-1.
Pudo ser el definitivo punto de inflexión en el encuentro pues Alcaraz, tras salir del apuro, consiguió el break y eso que Khachanov igualó un 0-40 y a continuación, con su tercer juego del tirón, estableció el 4-1.
Su contrincante aguantó -el 4-2 lo obtuvo en blanco- y más tarde castigó las dudas que le volvieron a Alcaraz para acecharle aún más. Con un nuevo break y luego sacando niveló la contienda (4-4) y la sensación era la de que Carlos volvía a decaer. No obstante, como había hecho ya antes, reaccionó para retomar el mando aunque las incertezas aún seguían ahí. Era evidente de que no era uno de sus mejores días aunque se agarró a la tierra, apretó los dientes y consiguió el 6-5 y al resto el 7-5 definitivo después de 1 hora y 2 minutos de un choque en el que el puntaje global se lo llevó el ruso (95-98) pero eso no se correspondió con el resultado final.
En cuartos, con el pase a semifinales en juego, Alcaraz se cruzará con Draper, de 23 años y número 5 del mundo, quien venció al francés Corentin Moutet remontando por 1-6, 6-4 y 6-3. Al inglés se enfrentó cinco veces en el circuito con tres victorias y dos derrotas en ese cara a cara.