CARTAGENA. Los policías aislados desde el pasado sábado 25 de abril por la detección de síntomas compatibles con coronavirus, se reintegrarán al servicio después de que las pruebas médicas hayan dado negativo, según ha informado el Gobierno municipal.
El proceso febril de un policía en prácticas activó el protocolo de prevención sanitaria, que consiste en la identificación y aislamiento preventivo de los policías que habían trabajado con él en los días previos. En principio fueron once los agentes a los que se alertó y se recomendó que se mantuviesen aislados en sus propios domicilios.
A estos se sumaron otros cuatro casos que también fueron aislados debido a que la pareja de uno de los agentes tuvo fiebre y se optó por ponerles en cuarentena, pero una vez que se les realizaron las pruebas estas dieron negativo.
Desde el comienzo de la pandemia, se han establecido medidas de protección y protocolos de atención sobre personal, instalaciones y medios policiales, siguiendo las instrucciones del Servicio de Prevención de Riesgos Laborales y la Delegación del Gobierno. Se implantaron instrucciones de higiene, separación física y se toma la temperatura diaria de los agentes.
A los equipos de protección individual (EPI) con los que se actúa en los servicios normales, se han sumado equipos de protección especiales para actuaciones de riesgo significativo de contagio, que están a disposición de los agentes en todos los destacamentos del municipio. La frecuencia de limpieza se ha duplicado en las instalaciones municipales, existe un servicio diario de limpieza y desinfección de vehículos policiales, que también se realiza con una máquina de ozono entregada por un donante.