La Fiscalía también investiga al obispo Lorca Planes y su cúpula por el 'escándalo de las vacunaciones' 

MURCIA. La Fiscalía Superior de la Región investigará las vacunaciones contra la covid del obispo de Cartagena, José Manuel Lorca Planes, y de algunos de sus allegados en la cúpula del Obispado. El Ministerio Público quiere determinar si ha existido delito en el proceso y añade este caso a las diligencias de la investigación contra funcionarios y altos cargos de la Consejería de Salud que se habrían vacunado en contra del protocolo establecido, como confirman fuentes de la institución a Murcia Plaza.

Lorca Planes admitió que había recibido la primera dosis en la residencia en la que se vacuna de la gripe cada año, perteneciente a la Diócesis. El caso del obispo no está recogido en el protocolo del Ministerio de Sanidad. Planes defiende que no creía que hubiera actuado de manera errónea: "Monseñor Lorca, que en ningún momento creyó estar actuando mal y que jamás contempló la posibilidad de que pudieran faltar vacunas, decidió no ponerse la segunda dosis, que tendría que haber recibido estos días", señalaba un comunicado difundido en la noche de este lunes por la Diócesis de Cartagena.

La de la Fiscalía no es la única investigación que se va a llevar a cabo sobre LOrca Planes. El obispo está también bajo la lupa de la Consejería de Salud. El portavoz técnico del Comité Covid, Jaime Pérez, confirmaba este martes en una rueda de prensa que la Consejería abrirá una investigación.

Pérez explicaba que el centro residencial -perteneciente a la Diócesis según aseguró el obispo en un comunicado- introdujo a Lorca Planes "como personal" del mismo en el listado enviado para la administración de la vacuna.

"Por lo que se nos ha informado y hemos averiguado, la vacunación se produjo en una residencia. A nosotros nos mandan los listados de personas a vacunar, pero es el sitio donde se va a vacunar el que dice su personal o personas ingresadas" que tienen que recibir la dosis, ha asegurado el portavoz técnico, quien entiende que la Comunidad "no es responsable de eso".

Por su parte, el prelado explicaba en la nota que se puso la dosis porque "acude con asiduidad" al centro, cuyo nombre no reveló y de cuyo patronato es el presidente. "La última visita la realizó el pasado 30 de enero para celebrar la Eucaristía junto a los residentes", indica. Sólo días antes, asegura, el obispo rellenó "el consentimiento necesario para que la Consejería de Salud autorizase su vacunación".

El protocolo del Ministerio de Sanidad estipula que en la primera etapa se vacunaría a las personas que desempeñan su labor en "los centros sanitarios y sociosanitarios", como son los residentes, los trabajadores de las residencias y el personal sanitario que trabaja en la primera línea.