CARTAGENA. La cafetería del Molinete, denominada como Palacio del Molinete, echa la persiana después de que la concesión de dicha explotación finalizara meses atrás. La persona que mantenía la misma hasta hace unos meses seguía abriendo de manera esporádica con el visto bueno municipal, pero cerrar de momento.
El lugar privilegiado de este establecimiento hostelero volverá, por tanto, a salir a licitación con el mismo fin que hasta ahora: ofrecer este servicio en esta zona de gran importancia arqueológica de la ciudad.
La cafetería cuenta con 40 metros cuadrados útiles del inmueble, de los que 30 son para la zona de barra y mesas y 10 están destinados a almacén y cocina, contando con acometida eléctrica, iluminación, agua potable, desagües.
Junto a la cafetería existe una zona de aseos, uno para mujeres y minusválidos y otro para hombres, al servicio del bar, debiendo encargarse de su mantenimiento el propio concesionario
Todas las instalaciones que proponga realizar el concesionario (cámaras frigoríficas, cocina, cafetera, etc.) deben ir en consonancia con la configuración estética del conjunto del Parque Arqueológico del Molinete.
Junto a la nueva concesión de dicho establecimiento, ubicado en pleno casco histórico de la ciudad, la concejalía de Patrimonio y Contratación tiene previsto también volver a licitar el quiosco del parque Antonete Gálvez, cuya licitación quedó desierta meses atrás.
El quiosco deberá contar, al menos, con cocina, almacén, aseos adaptados a personas con movilidad reducida y toda supresión de barreras arquitectónicas a personas con movilidad reducida necesarias. La envolvente del quiosco-bar debe realizarse sobre la plataforma de hormigón existente en el parque, en principio se tratará de aprovechar la estructura ya existente, aunque puede plantearse dentro de la propuesta su modificación e incluso eliminación si fuese necesario por la calidad del proyecto propuesto.
En relación a la terraza, la ocupación irá sin coste alguno, ya que va asociada al canon de la propia concesión. Transformar esta estructura en un negocio de hostelería sería beneficioso para dotar de actividad al parque y prestar un servicio óptimo, inclusivo y de calidad, tanto a los usuarios del Palacio de Deportes como a todas las personas que hacen senderismo por esta zona, que son muchas.
El plazo de ejecución de dicha concesión será, probablemente, de 10 años, aunque se podrá prorrogar con carácter anual por 5 años más hasta un máximo de 15 años en total.
Desde el área están revisando y actualizando todas las concesiones para renovar que terminan en los próximos meses
Desde el año pasado se viene hablando de la nueva ordenanza de quioscos. La legislatura pasada el área de Comercio no fue capaz de sacarla adelante y en la actual no se han puesto con ella, aunque aseguran fuentes municipales que el texto está casi terminado y que saldrá en breve.
Recordemos que ésta permitirá la venta de otros productos más allá de los que hasta ahora se permitía: golosinas, flores, revistas, etc…, para conseguir que dichas instalaciones, hasta un total de 70 puedan variar su venta para convertirse, por ejemplo, en talleres de pequeña reparación (marroquinería, complementos, joyas…), servicios de estética excluyendo peluquerías), lavado de mascotas, papelería, promoción y servicios turísticos, venta de alimentos prefabricados sin manipulación, algunos servicios de estética, o su uso para asociaciones y colectivos, entre otros.
La concesión demanial del kiosco-bar de la Plaza Antonete Gálvez queda desierto y saldrá a licitación rebajando el canon
Los quioscos de Cartagena se reinventan: talleres de reparación, lavado de mascotas, venta de flores…
