Jugadores del Real Murcia durante un entrenamiento. Foto: RMMURCIA. El Real Murcia tratará de reencontrarse con la victoria en el partido que disputará este domingo a las cinco de la tarde y en su estadio, el Enrique Roca, frente al Real Unión de Irún y así continuar ocupando puesto de promoción de ascenso a LaLiga SmartBank.
El encuentro, de la octava jornada en el grupo 2 de la Primera RFEF y que coincidirá en horario con el clásico Madrid-Barça, le llega al conjunto entrenado por Mario Simón después de la derrota por 3-2 encajada el pasado domingo en el feudo del Nástic de Tarragona, un resultado que deja al Murcia en la cuarta posición con 11 puntos sumados, a cinco de la cabeza, que comparten el Eldense y el Alcoyano, y a tres del Castellón, tercero en la tabla.
La clasificación está muy apretada y la prueba de ello es que los granas tienen más cerca los puestos de descenso a la Tercera RFEF -esa zona la marca el Sabadell, decimosexto con siete puntos- que del ascenso directo.
Por eso, cada encuentro es una oportunidad para consolidar lo hecho y para evitar perder posiciones en una categoría que en poco se parece a la que abandonó el cuadro murcianista tras el ascenso logrado la pasada campaña.
Para esta cita el técnico madrileño tiene disponibles a los jugadores que causaron baja por sanción frente al Nástic, el portero Miguel Serna y el lateral derecho Javi Rueda, quienes fueron expulsados en el último choque disputado en casa y ganado por 4-2 contra la Sociedad Deportiva Logroñés.
"Es buen momento para refrendar esa victoria en casa otra vez con nuestra gente, haciendo buen partido y con buen juego", ha apuntado Simón, quien valora la respuesta de sus futbolistas pese al tropiezo en Tarragona.
"Como es habitual en este grupo la semana de trabajo está siendo excelente. En el día a día trabaja a un nivel muy alto, es competitivo y cada jugador busca ganarse el puesto sabiendo que venimos de perder y que el nivel de exigencia es alto", ha añadido.
Con respecto a lo ocurrido el pasado domingo ha apuntado que les faltó "un poco de agresividad en las transiciones" y que cometieron "errores no forzados que en esta categoría penalizan mucho y que son detalles que hay que mejorar".
Sobre el Real Unión de Irún, que es decimoquinto con ocho puntos, ha destacado que es "un equipo hecho para estar arriba y que de tres cuartos de campo hacia adelante tiene jugadores muy determinantes e importantes en la categoría, con experiencia en divisiones superiores".
Con relación al hecho de jugar a la misma hora que el Madrid y el Barça ha apuntado que confía en que "sean muchos los aficionados que vengan a vernos".
