CARTAGENA. El Jimbee Cartagena sigue sin entrar en la aristocracia del fútbol sala español, esa que incluye a los clubes que han conquistado algún título nacional, a pesar de haber estado muy cerca de lograrlo pues perdió por 3-4 en la prórroga contra el Fútbol Club Barcelona la de la XIII Copa del Rey que disputó este domingo en la localidad malagueña de Antequera.
Era un encuentro muy especial y el fútbol sala cartagenero se veía representando en una final estatal diecisiete años después de aquella de la Liga 2005/2006 de Primera División que el entonces denominado Polaris World perdió por tres victorias a dos contra ElPozo Murcia.
Más de medio millar de aficionados desplazados desde la ciudad portuaria vieron en acción a su equipo frente al Barça en un partido en el que los de Eduardo Sao Thiago Lentz "Duda" reaccionaron tras ir perdiendo por 0-2 y por 2-3 aunque no evitaron el 3-4 definitivo.
Ese selecto grupo de campeones nacionales en el fútbol sala es muy reducido.
En concreto en la Copa del Rey el Barcelona lidera el palmarés ahora con ocho de los 13 títulos puestos en juego y le siguen ElPozo y el Movistar Inter, ambos con dos; mientras que en el listado también figura el sorprendente BeSoccer UMA Antequera, que se proclamó campeón el pasado año contra todo pronóstico siendo equipo de Segunda División -ahora milita en Primera-.
En la Liga, en la Copa de España y en la Supercopa, de los clubes que actualmente compiten en la élite, los tres grandes -Inter, ElPozo y Barça- acaparan la mayor parte de los trofeos y el torneo copero, además, inscribió su nombre como ganador el Jaén Paraíso Interior con los entorchados conquistados en 2015, 2018 y también este año.
Otros equipos como el Mallorca Palma Futsal, el Viña Albali Valdepeñas y el Levante Unión Deportiva, que también militan en la máxima categoría, tampoco levantaron un título de carácter nacional pese a haber disputado varias finales durante las últimas campañas.